Dirigentes de la pesca artesanal de la región del Biobío dicen observar con preocupación que todavía no existan indicios de que el Comité Científico de Pequeños Pelágicos haya fijado una fecha para reunirse y revisar el informe que 31 organizaciones entregaron al subsecretario de Pesca y Acuicultura, Pablo Berazaluce, para solicitar un aumento en la cuota de la sardina.

Sara Garrido, dirigenta de la Federación Regional de Pescadores (Fedepes Biobío) y directora nacional de la Confederación Nacional de Pescadores ArtesanalFirma de carta conducente a CCes de Chile (Conapach), así como integrante del Comité de Manejo de Sardina, detalló que los pescadores están evaluando que hubo una atención a la problemática, «al parecer, solo porque podía haber conflictos el día del Censo, pero que si hubiera interés del Gobierno Regional y central, el Comité Científico tendría que haberse autoconvocado porque ya transcurrieron los diez días que por ley se toma para reunirse luego de tener un nuevo informe».

Por su parte, Rosendo Arroyo, presidente de la Fedepes, reiteró su deseo de que el Comité Científico «trabaje con conciencia y responsabilidad la documentación con que 31 organizaciones de la pesca artesanal del Biobío fundamentaron la petición de incrementar la cuota de sardina en 200.000 toneladas; pero esta semana debería haber novedades de algún adelanto en tal sentido», advirtió.

Además de ser presidente de la Fedepes Biobío, Arroyo es integrante del Comité de Manejo de Sardina y timonel del Sindicato Sipearbucor, de pescadores, armadores y buzos de Coronel, y comentó que están optimistas porque en la mesa técnica en que trabajaron con investigadores se realizó una «evaluación seria». Sin embargo, añadió, «el Comité Científico debe ser muy responsable o los pescadores artesanales se van a poner totalmente inquietos y ahí los dirigentes nos preocupamos, y mucho», enfatizó.

El dirigente también recordó que Pablo Berazaluce evaluó positivamente la mesa en que elaboraron la petición de más cuota, en la que, según Arroyo, los «pescadores trabajaron a la par con los investigadores sin perder de vista que de aquí a futuro está el objetivo de base que es seguir manteniendo la pesquería de la sardina sana, como está ahora».

En esa línea, aseguró que los pescadores artesanales «la cuidamos y está en buen estado porque el 80% de su cuota está en nuestras manos. Nosotros sabemos que dependemos de los peces, que tenemos que cuidarlos para que nos sigan dando el respaldo económico necesario para nuestras familias y para la actividad».

Antecedentes técnicosSardina (Foto Fedepes)

Entre los datos que las mujeres y hombres de mar hicieron llegar a la autoridad aparece que la cuota asignada para el año se capturó en pocas semanas y que los investigadores participantes explican que se puede otorgar aumentos superiores a las 400.000 toneladas en total. También que los antecedentes socioeconómicos de la pesquería permiten estimar que 214.000 personas son afectadas por esta actividad.

Recordaron que es ahora cuando hay abundancia y disponibilidad de biomasa en buen estado que está relativamente cerca de la costa. Luego comienza a alejarse, ejemplares mueren, y empiezan los temporales, situaciones que ponen el riesgo a los barcos y sus tripulaciones y aumentan los costos de operación.

«Lo que estamos diciendo los pescadores artesanales es una realidad. Entregamos antecedentes técnicos fundados. A nosotros nos cuesta realizar nuestra actividad con tantas restricciones como las que existen hoy en día y con estas ínfimas cuotas se nos hace mucho más complicado sobrevivir y mantener las embarcaciones que son fuentes de empleo», concluyó Rosendo Arroyo.