Globefish, una de las entidades de análisis de comercio de productos del mar dependiente de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO, por su sigla en inglés), emitió un nuevo informe sobre los mercados mundiales de seafood, en el cual se entregan datos cerrados al 2019 y además se realiza una proyección de acuerdo a cómo está afectando a la industria de productos del mar la pandemia del covid-19.

En cuanto al salmón Atlántico (Salmo salar), el reporte indica que se estima que la producción mundial total de esta especie aumentó en un 7% en 2019, con alrededor de 2,6 millones de toneladas producidas. Esto marca el tercer año consecutivo de fuerte crecimiento de la oferta, después de un aumento de alrededor del 5% en 2018. Los tres principales contribuyentes a esta expansión fueron Noruega, Chile y Escocia.

Noruega registró un aumento interanual del 6,5%, mientras que el total anual de Chile fue de un 10% más que en 2018. Escocia, mientras tanto, se recuperó de un pobre año 2018, con un crecimiento del 20%. Canadá fue el único gran productor de salmón Atlántico que vio una caída en los volúmenes de cosechas en alrededor del 2%.

“En Noruega, los efectos de la mortalidad por la floración de algas a principios de año no se sintieron hasta 2020. Las autoridades noruegas también recientemente actualizaron el sistema de semáforos, ofreciendo luz ´verde´ para 9 de las 13 zonas de producción, lo que significa que los acuicultores en esas regiones ahora podrán aumentar la capacidad en un 6%”, expresa el reporte.

También se sostiene que el factor principal que inhibe el crecimiento en las zonas restantes de Noruega tiene que ver con altos niveles de piojos de mar, que también están elevando los costos de producción. “Esto es una de las principales causas del ajuste de los márgenes en Noruega a pesar de los altos precios que han persistido por algunos años”, se menciona.

En cuanto a la industria chilena del salmón, el reporte afirma que este continúa enfrentando dificultades. “En el último trimestre de 2019, la industria enfrentó una serie de desafíos asociados con los disturbios sociales que incluyeron demoras en la cadena de distribución, bloqueos y desafíos logísticos. A pesar de estos obstáculos, en 2019 se cosecharon 697.400 toneladas de salmón Atlántico”, afirman.

“En 2020, el brote de Covid-19 está afectando tanto la producción nacional, como el comercio exterior. Las empresas del salmón están implementando protocolos de salud y seguridad para ayudar a combatir la propagación de Covid-19, siguiendo las recomendaciones de las autoridades”, añadió el reporte de Globefish.

Impacto del Covid-19

En esta ocasión, Globefish también presentó un análisis más profundo acerca de cómo la pandemia de Covid-19 está afectando a la industria del seafood. Según lo expresado, se trata de una situación “sin precedentes en los tiempos modernos, la cual sigue causando grandes perturbaciones en las sociedades de todo el mundo e infligiendo graves daños a la economía mundial”.

“Los gobiernos han introducido una serie de medidas destinadas a frenar la propagación del virus, que incluyen acciones de aislamiento social, limitaciones en los horarios comerciales y restricciones de viaje. El sector de productos del mar, junto con la mayoría de las industrias, tiene que lidiar con una sombría perspectiva de la demanda, así como una serie de desafíos de suministro. Con el cierre de la industria de restaurantes, la demanda de servicios de alimentos se ha evaporado, mientras que las ventas minoristas han estado marcadas por una volatilidad extrema”, afirma la repartición de la FAO.

Según el informe, la demanda de productos envasados ​​y congelados se ha disparado a medida que los hogares buscan abastecerse de alimentos no perecibles a expensas de las opciones de mariscos frescos. Al mismo tiempo, los distribuidores on line informan un mayor interés a medida que los consumidores domiciliarios exploran este tipo de alternativas.

En general, “la demanda se ha reducido drásticamente y los precios han caído para muchas especies, particularmente, aquellas que son importantes para la industria de restaurantes. Mientras tanto, los proveedores y procesadores están luchando con el cierre de negocios a lo largo de la cadena de suministro, así como con una serie de otras dificultades logísticas. Los transportistas deben lidiar con fronteras de carreteras cerradas o restringidas y retrasos en las inspecciones sanitarias, mientras que la cancelación a gran escala de vuelos ha afectado directamente el comercio de algunos productos frescos de alta gama que se transportan por vía aérea”.

Otras consecuencias del Covid-19 incluyen la cancelación de eventos clave de comercio de productos del mar en todo el mundo y un retraso en las cosechas acuícolas debido a la escasez de mano de obra. “Los representantes de productos del mar en muchos países están pidiendo ayuda financiera del gobierno, pero tales medidas solo pueden proporcionar un alivio limitado ante la agitación generalizada”, agrega el reporte. Concluye que “la incertidumbre sigue dominando las perspectivas, particularmente con respecto a la duración y la gravedad de la pandemia y se puede esperar una recesión prolongada del mercado incluso después de que se levanten o relajen las restricciones actuales”.

Para descargar el reporte de Globefish, hacer click aquí: GLOBEFISH Highlights_Issue 2_2020 (2)

Para revisar el análisis sobre el impacto del Covid-19, pinchar aquí.

Fotografía principal: Tres Peces