A pesar de la actual pandemia que está viviendo el país y el mundo –a causa de la propagación del Covid-19– la Dirección General del Territorio Marítimo y de Marina Mercante de Chile (Directemar) continua trabajando y con bastante intensidad. De hecho, la organización ha estado operando bajo la premisa “Porque la actividad marítima no para, nosotros tampoco”.

AQUA.cl entrevistó al Vicealmirante Ignacio Mardones Costa, director general de Directemar –con sede en Valparaíso (región de Valparaíso)– quien ha estado liderando el importante papel que está cumpliendo esta institución en términos de resguardar que la actividad marítima opere bajo condiciones de seguridad en estos meses en que el país está bajo emergencia sanitaria.

Se ha evidenciado que, desde el inicio de la pandemia, se han tomado algunas medidas por parte de las autoridades marítimas locales, provenientes de lineamientos de nivel central. ¿Cómo ha sido este trabajo?

En lo general, desde que el Gobierno comenzó con las medidas para prevenir los contagios por Covid-19, en Directemar vislumbramos los posibles efectos en los ámbitos de nuestra competencia que esto podía tener y que, por ende, generaría implicancias en la actividad marítima del país, viéndose afectados nuestros usuarios. Para ello, asumimos una impronta de trabajo, reflejada en la consigna “Porque la actividad marítima no para, nosotros tampoco”. En lo particular, se re ha realizado un trabajo conjunto entre las Direcciones Técnicas en busca de generar medidas o acciones, en el corto y mediano plazo, facilitando los trámites y/o procesos para mantener la actividad marítima funcionando, pero sin perder nuestra misión de salvaguardar la vida humana con mares más limpios, más seguros y conocidos.

Consecuente con lo anterior, se impartieron instrucciones a nuestras Autoridades Marítimas Locales para adoptar no sólo una efectiva entrega de información de las medidas establecidas, sino que para que tomaran las correctas acciones de resguardo sanitario entre los usuarios marítimos para el cuidado y la salud de quienes interactúan en la actividad.

Algunas de las acciones, incluyendo el área comprendida entre las regiones de Los Lagos y Magallanes, han tenido relación con disminuir el contacto físico a través, por ejemplo, de reuniones online o del levantamiento de observaciones de inspecciones de naves de manera remota. A ello se suman prorrogas de vigencias de certificados de navegabilidad, auditorias de protección y estudios de maniobrabilidad; extensión de plazos para inspecciones de equipos de buceo y vigencias de resoluciones de autorización en temas de preservación del medio ambiente acuático (uso de químicos o planes de contingencias); y prórroga de los trámites o renovaciones de todas las categorías de títulos, matrículas, licencias, permisos, libretas y credenciales de nuestros usuarios marítimos y portuarios, entre otras.

Además, en cuanto a la capacitación del personal marítimo, se puso en marcha el Aula Virtual por parte de nuestro Centro de Instrucción y Capacitación Marítima (CIMAR), lo cual permite que, a la fecha, se estén efectuando cursos modalidad online, incluso en los Organismos Técnicos de Capacitación, pudiendo efectuar la etapa teórica de sus cursos marítimos por medio de plataformas virtuales.

Para trabajadores como pescadores, buzos y operarios del rubro acuícola, ¿han existido disposiciones trabajadas con otros organismos del Estado, por ejemplo, con el Ministerio de Salud, para evitar la propagación del virus?

En esta materia, las disposiciones se coordinaron con el mismo Ministerio de Salud y sus dos Subsecretarías, como también con las Seremis del país, además de otros servicios públicos, como el Servicio Nacional de Pesca y Acuicultura y el Servicio Nacional de Capacitación y Empleo, entre otros. Un ejemplo fue el apoyo a la implementación de la instrucción de la Subsecretaría de Salud Pública referente a recomendaciones de actuación en los lugares de trabajo, donde se incluían indicaciones específicas sobre los elementos de protección personal utilizados por los buzos. Otro aspecto, son las coordinaciones a nivel central que se han traducido en lineamientos a fiscalizadores del ámbito pesquero, asegurando el normal funcionamiento de la actividad y, por ende, abastecimiento de recursos del mar a la población. Además, se dieron directrices para la gestión regional ante eventos de mortalidad masiva de especies salmonídeas.

En cuanto a las dotaciones de naves, ¿existen consideraciones especiales producto de las restricciones sanitarias?

Han existido coordinaciones con las Autoridades de Salud de cada región, implementando puntos de control en los accesos a las instalaciones portuarias, muelles, rampas y embarcaderos; esto, para resguardo tanto del usuario marítimo nacional, como para el personal embarcado de naves extranjeras, verificando la condición sanitaria del embarcado y su relevo en puerto nacional. También, de acuerdo con las disposiciones del Ministerio de Salud, se establecieron protocolos para limpieza y desinfección de ambientes, y para la atención de casos sospechosos por parte de dotaciones o pasajeros.

Pensando en el panorama posterior a la pandemia, ¿cómo afrontará Directemar su labor, especialmente, en el sector acuícola? ¿Se ha pensado mantener algunas de las actuales medidas?

Considerando que lo único seguro es la evolución de la pandemia, nuestra evaluación es constante, previendo posibles escenarios y así, vislumbrando las acciones que deberíamos ejercer o identificar. Son asuntos que abordaremos como organización, lo cual, indudablemente, es un trabajo que tendremos que hacer junto a los mismos usuarios debido a que ellos nos pueden hacer llegar sus necesidades, por el bien de sus trabajadores y su actividad comercial. Por ello, todo se irá evaluando a medida que avance la pandemia, en el entendido que somos un servicio más dentro de los distintos organismos del Estado que están analizando la mejor manera para afrontar el futuro nacional, equilibrando la salud de la sociedad civil con la necesaria estabilidad económica del país.

En lo específico, para la actividad acuícola, dentro de esta proyección de trabajo, he dispuesto que se analicen las necesidades que se han generado producto de la pandemia, con el objeto de detectar la mejor forma de abordarlas de manera oportuna y conjunta, abarcando ámbitos de la seguridad de las personas y las naves, dentro de toda la cadena logística, contribuyendo a que la acuicultura se mantenga su desarrollo.

En el ámbito pesquero y acuícola es sabido que el enfoque ecosistémico es la actual metodología internacional para el ordenamiento del sector. Directemar, ¿ha incluido este concepto dentro de su quehacer?

La función de la organización es mucho más que el mero control. Poseemos alcances en distintos ámbitos, siendo la fiscalización una de las tantas formas de interacción con el usuario para el cumplimiento de nuestra misión. El ordenamiento pesquero supone tareas de administración, manejo y fiscalización, donde el citado enfoque es una mirada internacional que impulsa la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y Agricultura (FAO), siendo un instrumento para abordar de mejor manera el ordenamiento pesquero y acuícola, incluyendo a todos los componentes del ecosistema, es decir, bióticos, abióticos, antrópicos, clima y mercado, entre otros, a través de una gobernanza y co-manejo efectivo.

Ante esto, Directemar aborda dicho instrumento, primero, siendo parte del ordenamiento pesquero y acuícola nacional, para luego, instruirse sobre el mismo. Por lo anterior, se ha comenzado a preparar a oficiales en el tema a través del “Magíster en Gestión de Recursos Acuáticos” de la Pontificia Universidad Católica de Valparaíso, cuya malla de estudios incluye citado enfoque, esperando, así, continuar siendo parte efectiva del ordenamiento pesquero regional de manera conjunta con otros organismos internacionales y nacionales. El objetivo es aportar a la gestión gubernamental e institucional para el desarrollo sustentable de la pesca y acuicultura del país, en sintonía con las nuevas tendencias a nivel mundial.

Fotografías: Directemar