Actualmente las empresas productoras aplican protocolos rigurosos de bioseguridad y manejo integrado de enfermedades, que incluyen estrategias de vacunación, monitoreo constante de la salud de los peces y un uso limitado y responsable de antimicrobianos.
“Estas medidas han permitido la producción de peces libres de antibióticos durante toda su vida productiva, demostrando un enfoque innovador hacia el bienestar animal y la sostenibilidad”, explica su gerente de Producción de Australis Seafoods, Cristián Sauterel.
También destaca la utilización de sistemas de cultivo más eficientes, como los de recirculación (RAS). “Estos sistemas optimizan el uso del agua y garantizan un control estable de los parámetros de calidad. Han permitido importantes avances en la calidad de los smolts de Australis, lo que se traduce en peces mejor adaptados al agua de mar. Los wellboats y camiones de alta tecnología aseguran un traslado adecuado de los peces, con monitoreo continuo de los parámetros ambientales”, comenta el gerente de Producción de Australis.
A esto suma los “sistemas de monitoreo y muestreo: Tecnologías avanzadas permiten un seguimiento detallado de os parámetros ambientales y la salud de los peces; y por otro lado las estructuras de centros de cultivo, cuyas innovaciones en las jaulas de mayor tamaño y resistencia permiten operar en entornos con mejores condiciones ambientales”.
Lo anterior, por supuesto, en conjunto con pontones de última generación que “ofrecen mayor capacidad de almacenamiento y distribución de alimento, al mismo tiempo que proporcionan condiciones más seguras y confortables para el personal que habita en ellos durante su turno laboral”, comenta Cristián Sauterel.
Sensores y monitoreo
Al respecto, en AquaChile están convencidos de que solo existe una producción saludable cuando se mantiene una actitud responsable hacia los animales. “Es por lo que, desde 2022, toda nuestra producción animal está certificada en bienestar animal”, revelan desde la compañía.
“Para lograrlo, la producción de agua dulce se ha perfeccionado con el uso de sistemas RAS, lo que permite, además de consumir menos agua, contar con biofiltros que cuentan con sensores en línea para medir y controlar todos los parámetros bioquímicos y físicos del agua, lo que nos permite garantizar las mejores condiciones de cultivo de los peces”, detallan.
Otra de las empresas que se destaca en estos avances es Blumar, quienes detallan mejoras en las condiciones de transporte de los peces con mayor tecnología, mejor monitoreo de los parámetros en línea durante esta etapa, además de la incorporación de los wellboats.
“Hemos incorporado nuevas tecnologías como bioestimadores que evitan manipular los peces, previniendo el estrés y evitando el sufrimiento innecesario. Cámaras que permiten monitorear distintos parámetros de bienestar, que disminuyen el riesgo de pérdidas de alimento durante la alimentación, contribuyen a asegurar sus necesidades fisiológicas y a evitar condiciones de estrés”, detalla la subgerenta de Salud de Salmones Blumar, Daniela Vargas.
En tanto, el subgerente técnico de Cooke Chile, Eduardo Jara, destaca que, en las últimas décadas, los avances tecno lógicos en la salmonicultura han sido diversos y han contribuido significativamente al bienestar de los salmones.
“En genética, se han desarrollado mejoras enfocadas en la robustez de los peces; en biotecnología, la creación de vacunas ha sido clave para prevenir enfermedades infecciosas. Asimismo, en el ámbito de la nutrición, se han diseñado alimentos funcionales que favorecen el crecimiento integral de los salmones. Por otro lado, la incorporación de tecnologías para la estimación de biomasa, la alimentación y la evaluación de la condición de los peces ha permitido reducir su manipulación, favoreciendo su bienestar”, recuerda.
Lea en extenso el artículo en Revista Aqua.
Fotografía: Australis Seafoods y Cooke Chile.