Según las últimas cifras presentadas por FAO a fines de marzo de 2023 para los resultados de la acuicultura mundial en 2021, las cosechas mundiales de pescado y mariscos, excluyendo algas (35,1 mm de tons), mamíferos y productos varios, alcanzaron la cifra récord de 90,9 mm de toneladas, superando en un 3,7% los valores de 2020. Estas cosechas tienen un valor de primera transacción de US$280.888 millones. Las cosechas acuícolas de 2021 se comparan con 91,2 mm de tons de pesca silvestre, lo que arroja un desembarque mundial total de las especies mencionadas de 182 mm de tons, superando por primera vez la barrera de los 180 mm de tons. Así, en 2021 los cultivos significan un 49,9% del desembarque mundial total, porcentaje nunca alcanzado hasta la fecha y premonitorio del predominio de los cultivos sobre la pesca extractiva de las próximas décadas.
Los cultivos marinos representan un 38,2% de las cosechas mundiales en 2021, frente a un 61,8% de aquellos en agua dulce.
Como es conocido, China predomina en el escenario pesquero mundial, con un 56,4% de las cosechas y un 14,3% de las capturas mundiales, aunque su significación venga disminuyendo sistemáticamente desde un 61,2% y 16,6%, respectivamente en el año 2011, en especial como producto de un reordenamiento de su acuicultura en la segunda parte de la década de 2010, para ajustar ambientalmente su estructura a cánones de mayor sostenibilidad. Con todo, la acuicultura representa un 79,7% del desembarque total de China, mientras en el resto del mundo, ella significa tan solo un 33,7% en 2021, importancia que viene aumentando desde un 23,3% en 2011.
Con estos volúmenes mundiales de cosecha, los cultivos ya aportan un 82,8% del desembarque de peces de agua dulce; un 75,5% del de peces diádromos, entre los que están los salmónidos; un 74,3% de los moluscos; un 73,1% de animales misceláneos; un 66,3% de los crustáceos y tan solo un 5,3% de los peces marinos desembarcados, con una representatividad del 49,9% en el desembarque global del año 2021. ¡Un resultado verdaderamente extraordinario! Más aún, un 91,7% de los volúmenes cosechados se imputan a países de ingresos medios y sólo un 7,9% a países desarrollados, y un 0,4% a naciones y territorios de bajos ingresos.
En Asia, los cultivos de 2021 ya significan un 63,2% del desembarque total, mientras en Europa, un 20,9%; en América un 18,9%; en África un 18,3% y en Oceanía tan solo un 14.3%.
En valor de primera transacción, y en dólares de 2021, las cifras de FAO para ese año indican que Asia representa un 83,9% de las cosechas mundiales; las Américas un 6,7%; Europa un 6,6%; África un 2% y Oceanía un 0,8%. A su vez, con cosechas valoradas en US$16.444 millones en ese mismo año, América Latina y el Caribe (ALC) aportan un 5,9% del valor de la acuicultura mundial y un 4,2% de los volúmenes, con 3,8 mm de tons producidas de las especies analizadas y una alta preponderancia de América del Sur.
Las cifras señaladas indican que en 2021 el valor medio por kilo de primera transacción de las cosechas mundiales alcanza a US$3,1, cifra que viene disminuyendo sistemáticamente desde US$3,6 en 2016 (dólares de 2021). En el caso de ALC, Los valores medios de cosecha en 2021 son de U$ 4.3 por kilo, valores que también caen desde US$6,6 por kilo en 2017 (dólares de 2021). De cualquier forma los valores medios por kilo de la acuicultura de ALC son los mayores del mundo, después de los de Oceanía, continente que aún no muestra volúmenes de producción demasiado expresivos.
A pesar de estos interesantes resultados para la acuicultura mundial y en ALC, debe indicarse que las tasas medias de crecimiento acumulativas anuales de los volúmenes cosechados en el mundo tanto como en ALC vienen disminuyendo con bastante fuerza en los últimos decenios, lo que significa una baja en la velocidad de crecimiento de la producción sectorial, aunque todavía se exceden con creces las variaciones del aumento poblacional, lo que se traduce en un aumento sistemático de la disponibilidad de pesca de cultivo (y total) por persona a nivel mundial. Así, entre los valores promedio de 1989-1991 y 1991-2001, la tasa anual de aumento de los volúmenes de cosecha de la acuicultura mundial fue de un 9,6%; entre 1991-2001 y 2009-2011 fue de un 5,9%, mientras entre 2009-2011 y 2019-2021 ha sido de tan sólo un 4,3%. En el caso de ALC, para esos mismos períodos, los crecimientos anuales han sido de 16,1%, 8,3% y 6,5%, respectivamente. Sin perjuicio de lo anterior en el último quinquenio (2016-2021) los volúmenes de cultivo en ALC han tenido un despegue más activo, a tasas de un 7,4% anual (-0,3% anual en valores), acompañado de una tasa de aumento anual de la pesca extractiva de un 6,4%, que contrasta con pérdidas sucesivas en ese último rubro en los tres quinquenios inmediatamente anteriores, de -9%, -0,2% y -0,6%, respectivamente, en orden descendente.
No ha ocurrido lo mismo con los volúmenes de cosecha en el mundo a nivel quinquenal, ya que los crecimientos en 2006-2011 son de un 4,8% anual (0,4% anual en valor); entre 2011 y 2016, de un 5,1% (9,4% anual en valor) y entre 2016 y 2021, de tan solo un 3,5% (0,4% anual en valor), con lo que ALC muestra un mayor dinamismo relativo que los valores medios mundiales en términos de volumen, aunque sistemáticos valores menores que los mundiales en las tasas de variación anual del valor cosechado ( -0,3% en 2016-2021; 5,4% en 2011-2016 y 5,3% en 2006-2011).
Dicho todo lo anterior, la acuicultura mundial y en ALC siguen su avance en forma sostenida, aunque , en una mirada de largo plazo, perdiendo velocidad y dinamismo por las crecientes dificultades encontradas en la gobernanza sectorial, por la carencia de visiones a largo plazo y de diálogo eficaz público-privado, ante la necesidad de acomodarse a estándares de sostenibilidad más exigentes y por problemas emergentes asociados al cambio climático y a otros desafíos que deberán ser enfrentados con energía para garantizar un futuro promisorio a las cosechas del futuro. Esto, cuando ya se avizora que seguirá intensificándose el cambio tecnológico en los sistemas productivos; cuando los mercados y los consumidores se tornan más exigentes y mientras las necesidades de empatizar con las poblaciones y organizaciones locales, de mejorar la imagen ante la comunidad y las fuerzas políticas se harán cada vez más relevantes.
Por el momento, la acuicultura mundial y la de ALC deberían seguir progresando. En el caso de ALC, con un marcado esfuerzo exportador, pero también con renovados impulsos al consumo doméstico que hoy día se ve amenazado por capturas que si bien se han recuperado parcialmente en los últimos 3 años, están unos 10 mm de tons por debajo de su aporte en los mejores años de 1990, donde se pescaron más de 24 mm de tons en 1994 y más de 20 mm en 1994-1996, frente a los 13,9 mm de 2021.
En el caso de la acuicultura en la Unión Europea y los Estados Unidos, el consumo interno continuará estando basado en importaciones desde el mundo en desarrollo, mientras China ya evoluciona a convertirse en un país importador neto de productos pesqueros, pese a sus importantes niveles de exportación, situaciones que abren interesantes perspectivas de mercado para ALC en los años venideros.
Entre los 199 países y territorios que han reportado cosechas en 2021, Chile ocupa el octavo lugar en volumen, Ecuador el lugar 12, y Brasil el 13. En términos del valor producido, los mismos países se ubican en los puestos quinto, noveno y 21 del ranking mundial, siendo el segundo año consecutivo en que Chile y Ecuador, este último con una extraordinaria producción de camarón cultivado de 896,3 m de tons valoradas en U$ 3.235 MM, (¡que ya superaron 1 mm de tons en 2022!), aparecen entre los top ten de la acuicultura mundial en términos monetarios.