Entró en vigor la veda extractiva de la corvina en todo el territorio nacional, medida que se extenderá durante los meses de octubre y noviembre. Este año se cumplen diez años de la implementación de esta regulación por parte de la Subsecretaría de Pesca y Acuicultura (Subpesca), cuyo objetivo es contribuir a la conservación de la especie, evitando su extracción en el período peak de desove y asegurando la renovación de las poblaciones.
La corvina es un recurso capturado principalmente por la pesca artesanal en las regiones de Maule, Biobío, Los Ríos y La Araucanía, además de ser de alto interés para la pesca recreativa. Su destino prioritario es el consumo humano nacional, con alta demanda en restaurantes del litoral del país.
Prohibiciones y fiscalización
El director regional de Sernapesca en Los Ríos, Rafael Hernández, señaló que “durante la veda está prohibida la captura, comercialización, transporte, procesamiento, elaboración y almacenamiento de la corvina y sus productos derivados, de acuerdo con la normativa vigente. Desde Sernapesca continuaremos con fiscalizaciones en puntos estratégicos para asegurar que se respete la veda en toda su cadena de valor”.
La veda constituye la única medida de administración de la corvina, ya que este recurso no cuenta con talla mínima de extracción ni está sujeto a cuotas de captura.
El Servicio Nacional de Pesca y Acuicultura (Sernapesca) es el organismo a cargo de la fiscalización en todo el país, con énfasis en aquellas zonas donde se concentra la pesquería.
El Servicio llamó a la ciudadanía a preferir otros productos del mar durante el período de veda y a denunciar irregularidades a través de la línea telefónica gratuita 800 320 032.
Fotografía: Corfo y Fundación Chile, Sernapesca