Temen que Chile quede rezagado en el desarrollo de la salmonicultura oceánica

Jul 7, 2016

En Noruega, el único proyecto aprobado hasta ahora para recibir fondos del nuevo programa de Gobierno es uno de SalMar, que precisamente construirá un centro muy lejos de la costa, donde por ejemplo el piojo de mar no puede sobrevivir.

Dos escenarios. Por uno, la demanda mundial por productos del mar seguirá aumentando con el correr de los años ya que se le identifica como un alimento saludable y más aun, se espera que los 7 billones de personas que hoy habitan el planeta lleguen a unos 9 billones a 2050, los que también presionarán la demanda al alza. Por otro, la industria chilena del salmón como se conoce actualmente tiene severas limitantes sanitarias, geográficas, de costos y de relacionamiento con otras actividades. ¿Qué hacer para enfrentar estos desafíos?

Con esa interrogante comenzaba un artículo publicado por AQUA hace un tiempo que llevaba por título «Compañías chilenas se articulan para fomentar la acuicultura en zonas expuestas». Y si bien todas concordaban en los alcances y beneficios que el desarrollo de este tipo de cultivos traería para el país, ellas mismas ahora alertan de lo que podría pasar si es que no se agiliza el proceso.

En esa línea, el gerente general de EcoSea Farming, Rodrigo Sánchez, comenta que han venido observando durante su experiencia en montajes internacionales que la industria mundial está girando rápidamente hacia la salmonicultura oceánica lo que, según sus palabras, «es un riesgo para la industria nacional si no nos ponemos a tono a tiempo».

Sánchez señala que ya partió con fuerza en otros países la carrera por el offshore (mar adentro), y apunta a las innovaciones que se están presentando en Noruega, a los avances que desde hace tiempo está mostrando China, donde a él mismo le tocó verlo en la feria Expo Shanghái del año 2010, lo que podría materializarse con el reciente aviso del gigante asiático para producir salmones en alta mar, lo que para Sánchez «no sería una gran sorpresa». También apunta a iniciativas en países como Escocia, Canadá, Japón y Estados Unidos.

Público-privado

La entrega de nuevas concesiones para salmonicultura en Noruega, que es el mayor productor en el mundo, se ha vuelto casi imposible debido a las normas estatales enfocadas a frenar las infestaciones de piojos de mar y también de los escapes, evitando que ejemplares enfermos afecten a otros peces.

Y la compra de una licencia para cultivar salmón en Noruega vale unos EUR$6 millones, pero las autoridades están dispuestas a rebajar ese precio hasta un EUR$1 millón si detectan en el proyecto elementos innovadores para modelos más seguros de cultivo; y en esta línea las compañías están apuntando al alta mar.

Es así que decenas de empresas han presentado variados proyectos, siendo el único aprobado por las autoridades el de SalMar ASA que construirá un centro muy lejos de la costa, donde los parásitos no pueden sobrevivir.

Tal como el programa del Gobierno noruego que premia la creatividad y sustentabilidad empresarial con fondos estatales, el gerente general de P@tagon, Claudio Pavez, dice que se requiere de un esfuerzo y voluntad público-privada que debe enfrentar aspectos tecnológicos y de regulación que permita proyectar a la salmonicultura de los próximos años. «Es una oportunidad para definir una regulación adecuada al nuevo desafío y que exige a las empresas locales que participan del clúster acuícola, actualizar sus formatos y se integren a una línea de desarrollo que demanda alta especialización y calidad», enfatiza Pavez.

Por su parte, el director de AEX Group, Alonso Echeverría, subraya que el desafío es derribar «paradigmas y miedos de empresas y personas que hoy están produciendo y no ven necesario cambiar».

A su juicio, es válido ese sentimiento en aquellos que tienen un negocio que les «funciona y fuerzan a responder ¿por qué cambiar? ¿qué tan seguro y beneficioso sería?». En este sentido, el mismo Echeverría responde que ser el primero siempre tiene su cuota de riesgo y, según dice, como cultura no estamos acostumbrados a esto.

«Personalmente estoy seguro que tenemos un tremendo capital humano y conocimiento adquirido en varias empresas locales que prestan servicios de nivel mundial tan buenas como cualquier otro país productor. Y el desafío, entonces, es poder acercar a esta iniciativa a todos los actores, sean ONGs, pescadores, turismo y usuarios de las zonas para que en conjunto tomen en cuenta las consideraciones de cada uno y podamos usar el mar de manera responsable, tanto con el medio ambiente como con las personas y entidades que usan estas áreas», concluye el director de AEX.

Lo último

Mowi dio inicio a su cuarta versión de Turismo Salmonero

La nueva edición cuenta con cinco fechas programadas en la región de Aysén, que incluye un recorrido por piscicultura, centro de cultivo, planta secundaria y diversas actividades para promover el desarrollo económico local de la zona.

Te recomendamos

Mowi dio inicio a su cuarta versión de Turismo Salmonero

La nueva edición cuenta con cinco fechas programadas en la región de Aysén, que incluye un recorrido por piscicultura, centro de cultivo, planta secundaria y diversas actividades para promover el desarrollo económico local de la zona.

REVISTA DIGITAL

Suscríbase al Newsletter Aqua