Los productos pesqueros han experimentado un aumento en su consumo debido a su mayor disponibilidad, lo que ha estado acompañado de una baja de precios en algunos de ellos, como el jurel, según Estrategia.
De acuerdo a estimaciones, el 2000 cada chileno consumió 22,1 kilos de productos pesqueros, básicamente en estado fresco y como conservas. Esta cifra es 46% superior ala registrada en 1968, en que se consumía 15,1 kilos por persona. El consumo de estos alimentos está liderado por el Gran Santiago, donde alcanza a 26,5 kilos/año por persona, lo que constituye 20% más que el promedio nacional.
Según estos datos, Chile tendría un consumo superior al promedio del mundo el que alcanza los 15,7 k anuales por habitante.
Al analizar la información en forma más detallada, es posible consignar un fuerte crecimiento en el consumo de los productos pesqueros procesados, a expensas de los productos frescos, los que presentan una tendencia a la baja entre 1968 y el 2000, pasando de 9,7 kilos a 7 kilos por persona al año, mientras que en el año 2000 el consumo aparente de conservas es de 8,8 kilos por habitante al año, lo que en 1968 sólo alcanzaba a 5 kilos.
Por su parte, el consumo de productos congelados también muestra un importante aumento, al pasar de 0,3 kilo a 6,2 kilos en este período, cifras que nivelan a Chile con promedio mundial.
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