(La Tercera) El domingo 21 de febrero será una fecha clave para el Presidente Evo Morales. Ese día se realizará el referéndum constitucional en el que los bolivianos decidirán si aprueban o rechazan una reforma que habilitaría al Mandatario paceño postular a una tercera reelección.
A una semana y media de ese evento, el gobierno organizó una extensa ronda de reuniones para analizar el escenario del juicio con Chile en la Corte Internacional de La Haya, tema que ha impulsado internamente la popularidad de Morales.
Las citas se han llevado a cabo desde el martes. Y en ellas han participado los abogados Antonio Remiro Brotons y Monique Chemillier-Gendreau, junto al agente Eduardo Rodríguez-Veltzé.
En otro encuentro, producido ayer, participaron también Morales, el vicepresidente Álvaro García Linera, el canciller David Choquehuanca, el vicecanciller Juan Carlos Alurralde; los ministros de la Presidencia, Juan Ramón Quintana, de Gobierno, Carlos Romero, de Defensa, Reymi Ferreira, y de Transparencia, Leny Valdivia; y el procurador Héctor Arce. Y de todas esas reuniones fue excluido el vocero de la demanda marítima de Bolivia, el ex presidente Carlos Mesa.
En el equipo chileno ven como poco probable que La Paz remueva permanentemente al vocero de la demanda. Esto -explican- porque existe una alta valoración internacional sobre su papel.
Así, dicen que dos factores explicarían su exclusión. Primero, que estas reuniones se realizaron teniendo en mente la cercanía con la fecha del referéndum; y segundo, que en este lapso el gobierno de Morales intentará contener la exposición del vocero de la demanda. Esto, debido a los cuestionamientos lanzados por Mesa en los últimos meses a Morales y, además, por una preocupación instalada en Palacio Quemado: que el rol de Mesa en el juicio podría catapultarlo como posible carta presidencial. “No lo van a sacar, pero tampoco lo van a levantar, al menos antes del referéndum”, dice un integrante del equipo jurídico de Chile.
Bajo perfil
En el equipo de colaboradores del vocero de la demanda dijeron que Mesa está sorprendido por su marginación. Y agregan que desde Palacio Quemado sólo se le notificó que recién después del referéndum del 21 de febrero sería convocado a una reunión junto a otros ex mandatarios.Antes de eso, explican, deberá mantener un bajo perfil.
En su entorno se quejan de que el portavoz de la demanda suele participar de estas reuniones de trabajo. Además, recalcaron que en la carta que contiene sus atribuciones se estipula claramente que su rol abarca una vocería “jurídica” y “política”, documento que, en todo caso, evitaron recordar públicamente para no escalar la tensión.
Sin embargo, en contraposición, las autoridades bolivianas manifestaron una versión distinta. Rodríguez-Veltzé dijo que “hay algunas reuniones que son específicamente para quienes conducen el tema legal, de manera que cuando el gobierno decide celebrar reuniones, también decide quiénes concurren”, mientras que el ministro Romero comentó que “nadie va a desmerecer el papel de Mesa, pero de acuerdo a la explicación de la Cancillería éste es un trabajo jurídico”.
El propio Morales dijo que las citas de esta semana tienen un carácter “técnico” y “jurídico”. Y agregó: “La última reunión era en Bruselas, con casi todo nuestro equipo externo. ¿Por qué esa vez no se preguntaron (por la ausencia de Mesa)?”.
En todo caso, en las reuniones de esta semana participó el secretario general de la Dirección de Reivindicación Marítima (Diremar), Emerson Calderón, organismo que tiene entre sus objetivos “proponer y coordinar las acciones, políticas, lineamientos y directrices en la demanda”.
Enfrentamientos
La decisión de marginar al vocero de la demanda de estos encuentros se produce en medio de fuertes diferencias al interior del equipo.
En enero, Mesa dijo que Morales “le debe al (ex) presidente Sánchez de Lozada mucho más de lo que él mismo se atreve a reconocer”. Esto, apuntando a la “construcción” del Estado Plurinacional, base del programa de Morales, recibiendo fuertes críticas del oficialismo. Y previamente, Mesa ha criticado la posibilidad de que Morales postule nuevamente a la reelección. “No soy partidario de ninguna reelección indefinida, ni por más períodos del Presidente Morales”, sostuvo en octubre.