El Banco Interamericano de Desarrollo (BID) financió la construcción del Buque de Investigación Pesquera y Oceanográfica (BIPO), el cual fue puesto en operación este miércoles 23 de abril en Mazatlán, Sinaloa, por el Presidente de la República de México, Enrique Peña Nieto.
De acuerdo con un comunicado del organismo multilateral, el buque aportará una importante contribución a la innovación en México y será utilizado por el Instituto Nacional de Pesca (Inapesca), bajo el Componente de Fortalecimiento a la Investigación Biológico Pesquera del Programa de Fortalecimiento de Bienes Públicos Rurales.
Este buque, único en México, significó una inversión de EUR$24,9 millones (aproximadamente US$34,5 millones) y operará con laboratorios y tecnología de punta en aguas profundas de la Zona Económica Exclusiva (ZEE) del Pacífico Mexicano a partir de mayo de 2014.
Su objetivo, añadió el BID, “es la generación de información sobre el estado de los recursos pesqueros en aguas profundas que actualmente no son explotados por el sector pesquero mexicano con miras a su aprovechamiento”.
De igual manera, la entidad internacional detalló que los montos de inversión que corrieron por parte del Gobierno Federal incluye los costos de construcción, supervisión de obra, asesoría técnica y capacitación de personal para operar y mantener la nave, así como equipo de investigación especializada y el fortalecimiento de la capacidad científica del personal investigador que lo tripulará.
“Este buque se encuentra equipado con la tecnología más novedosa de monitoreo y laboratorio para llevar a cabo investigación biológica marina, pesquera y oceanográfica, y fue especialmente diseñado para capturar datos de diferente naturaleza (ambientales, biológico marinos, climáticos, pesqueros, entre otros), con gran precisión”, aseguró el BID.
Además, representa la mejor integración y optimización de estudios de la comunidad científica aplicada al aprovechamiento de los recursos marítimos que generen fuentes de riqueza en México, destacó el Banco Interamericano de Desarrollo.
Entrega presidencial
Por su parte, el director del Inapesca, Raúl Romo, le explicó al Presidente Peña Nieto el funcionamiento de la nave, sus alcances y potenciales beneficios para la captura.
La embarcación cuenta con una autonomía de 40 días de navegación, lo que permitirá estudios prolongados en alta mar y trabajos de exploración en profundidades superiores a los 3.500 metros dentro del mar patrimonial.
El buque, precisó el funcionario durante el recorrido a bordo del barco que permaneció inmóvil en el muelle durante la entrega presidencial, tiene un equipo de alta tecnología y se tendrá un registro real de la fauna existente, y se localizarán nuevas zonas aptas para pescar.
“De esta forma los 22 investigadores y 18 tripulantes que llevará la nave durante sus exploraciones (las cuales pueden extenderse hasta por 320 días al año), determinarán con precisión científica la dimensión real de los recursos pesqueros en el Pacífico, para hacer una explotación responsable y cuidar las poblaciones vulnerables”, sostuvo el director del Inapesca.
Con la visita del Presidente de la República, el barco entró formalmente en operación a cargo del Inapesca, que compartirá la información científica obtenida para asegurar la explotación racional de los recursos.