Las empresas procesadoras y exportadoras de algas dieron a conocer su alarma por la constante caída del dólar y el modo en que está afectando a sus integrantes. “Nuestros socios más frágiles están al borde de cerrar sus puertas, con el consiguiente impacto y desempleo en la economía”, expresó el Comité de Productores de Algas
marinas (Copram).
Los principales productores de algas del país, “ante la pasividad del Banco Central”, dieron a conocer antecedentes sobre la compleja situación que enfrenta su industria afectada por el precio del dólar más bajo de los últimos treinta años.
Copram agrupa a las principales empresas productoras de algas secas, agar-agar, carragenina y alginatos del país. Su actividad ha posicionado el país como el primer productor de agar agar en el mundo y el tercero de carrageninas. Las empresas se abastecen comprando la materia prima a los pescadores artesanales, a lo largo de todo el país, generando empleo para 6.456 pescadores artesanales mariscadores de orilla y también para una parte importante de los 13.105 buzos artesanales.
Las algas suman 390.577 t de desembarque, un 23% de las capturas del sector artesanal. Las exportaciones de este año sobrepasarán los US$ 110 millones.
Amarga realidad
Sin embargo, las cifras y el empleo que genera el sector están amenazadas por la incertidumbre. La depreciación de 44% que ha tenido el peso respecto al dólar -desde principios de 2003- ha implicado pérdidas para la industria nacional de algas, cuyo principal costo es la mano de obra artesanal, que no puede indexar a dólar.
Algunas empresas han tomado seguros para ventas en dólares que han sido insuficientes debido a que tienen plazo limitado, venciendo en los próximos días. Las renovaciones se plantean en condiciones de alta incertidumbre y con precios bajos.
Mientras las empresas con un mayor respaldo pueden soportar pérdidas por más tiempo (con la expectativa que los valores suban en el corto plazo), las pequeñas y medianas se han visto fuertemente afectadas. De mantenerse estos valores, las empresas dejarán de percibir en el año 10.548 millones respecto al dólar promedio del año pasado. (ó 10.881 millones, si se compara con el valor promedio de 2003).
“Resulta imperativo que el gobierno adopte decisiones, antes que los distintos sectores exportadores, principalmente Pymes comiencen a entrar en crisis”, agrega Copram, cuyos socios conocieron normas como la que dictó Noruega, estableciendo que el 50% de los ingresos en dólares se invierta en un Fondo en el extranjero, manteniendo así los niveles de precio.