Hace diez años, en Puerto Montt, un grupo de empresarios unidos con el fin de dotar a los estudiantes de Educación Media Técnico Profesional (TP) de mejores oportunidades, dieron luz a la ONG Canales, con el objetivo de vincular la formación primaria con las industrias más importantes para el desarrollo de la región.
Hoy esa iniciativa se consolida articulando a distintos actores en una modalidad de aprendizaje integral, vinculando a las comunidades educativas, las empresas, los gremios y el mundo público. Y ahora no solo en la macrozona sur austral, sino en ocho regiones del país, llegando con su modelo a más de 18 mil jóvenes.
Claudia Paredes, directora ejecutiva de ONG Canales, comentó que la mayor parte de los colegios TP tienen un índice de vulnerabilidad superior al 80% en Chile.
“¿Qué hacemos nosotros para aportar a esto? En este momento estamos trabajando en ocho regiones del país. Si bien es cierto Los Lagos fue la región que nos vio nacer y partimos con 12 establecimientos trabajando con el gremio acuícola, la Cámara Chilena de la Construcción y el gremio de los armadores (Armasur), hoy día trabajamos con siete sectores productivos en ocho regiones del país, llegando a 142 establecimientos”, detalló Claudia Paredes.
“Desarrollamos un modelo de trabajo que busca vincular los sectores productivos, los sectores públicos, los distintos actores como la educación superior y los establecimientos educacionales para fortalecer la educación TP. Estamos trabajando con turismo, el sector agropecuario, mantenimiento, marítimo portuario, telecomunicaciones, acuícola y construcción. En cada uno de ellos se asocian distintas especialidades”, detalló Paredes.
Andrea Zincker, directora Los Lagos destacó que “hoy en día la mayor parte de la matrícula está en los estudiantes TP está en la educación pública. Ya sea en municipios o en el Servicio Local de Educación (…) Tenemos la oportunidad de que la mayoría de nuestros estudiantes TP tiene la posibilidad de continuar trayectorias formativas porque tienen acceso a gratuidad. Pero la vulnerabilidad implica que muchas veces no tienen una base o red de apoyo que efectivamente los ayude a tomar una decisión consciente de cuál será su especialidad, o si continúan una trayectoria laboral o una trayectoria más bien formativa. Si ingreso al mundo del trabajo o a la educación superior”, esto ya que se espera que seis de cada diez estudiantes TP sigan estudiando.
Añadió que “el apoyo a la educación TP no implica tener una mano de obra inmediata, sino que implica darles pertinencia, formación a estos estudiantes, pero con una formación un poco más a largo plazo. Es decir, la visita, la pasantía, la práctica que acepto hoy dará frutos quizás en cinco años más cuando este estudiante 21 o 22 años”.
A modo de ejemplo, “la escases de tripulantes y gente que trabaje en el mar y tenemos solo dos especialidades en solo dos liceos. Uno en Puerto Montt y otro en Chonchi. Y en operaciones portuarias tenemos solo un liceo, que para nosotros es bonito recordarlo porque en un inicio ONG Canales fue parte del equipo que ayudó a formar la carrera de Operaciones Portuarias en el Liceo Comercial Miramar”.
Fotografías: B2B Media Group.