Este lunes 23 de noviembre fueron publicadas las bases administrativas que regirán la primera subasta pública de Licencias Transables de Pesca Clase B, que corresponden a los recursos sardina común y a tres tipos de crustáceos. En las bases, el Ministerio de Economía, Fomento y Turismo junto con la Subsecretaría de Pesca y Acuicultura (Subpesca) definieron reservar, del total de la cuota a subastar, un porcentaje importante para pequeñas y medianas empresas (pymes).
De esta forma -aseguró la Subpesca en una nota pública-, las bases indican que en el caso de la sardina común un 40% estará reservado a pymes, en tanto para el caso de los crustáceos esta reserva es de un 30%.
De acuerdo con las definiciones emanadas de los Comité Científico Técnicos respectivos, las cuotas a subastar corresponden a: 9.179 toneladas de sardina común, de la unidad de pesquería entre la Región de Valparaíso a la Región de Los Lagos; 661 toneladas de camarón nailon, de la unidad de pesquería entre la Región de Antofagasta y la Región del Biobío; 14 toneladas de langostino colorado, de la unidad de pesquería de la Región de Arica y Parinacota y la Región de Coquimbo; y 222 toneladas de langostino amarillo, de la unidad de pesquería de la Región de Atacama a la Región de Coquimbo.
Según afirmó el subsecretario de Pesca y Acuicultura, Raúl Súnico, «con esta decisión el gobierno está dando una señal potente a las pequeñas y medianas empresas, ya que serán estas plantas procesadoras o aquellas conformadas por pescadores artesanales las que podrán tener acceso a materia prima o cuotas extractivas de recursos como la sardina común o el camarón nailon».
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Por su parte, el jefe de la División de Desarrollo Pesquero de la Subpesca, Alejandro Gertosio, explicó que consideraron para la definición del porcentaje asignado a pymes y el tamaño de cada lote a subastar, entre otras cosas, la evolución de las cuotas de pesca, el régimen de administración al cual se encuentran suscritos los operadores, la heterogeneidad de los participantes de la actividad productiva, el procesamiento al cual se destinan estos recursos y la evolución de los mercados de destino.
Otro de los aspectos importantes que considera estas primeras subastas es el establecimiento de un límite de 40% de adjudicación por oferente, lo que, según Gertosio, «evitaría la concentración del total de las cuotas a subastar en un solo oferente».
Cabe recordar que la Ley General de Pesca y Acuicultura (LGPA), en su Artículo 27, establece las condiciones sobre las cuales corresponde la realización de las subastas de cuotas que dan origen a las Licencias Transable de Pesca Clase B, las cuales tendrán una duración de 20 años, estipulando además que será el reglamento que se encargue de los procedimientos de la propia subasta y del establecimiento de los cortes de los derechos a subastar.