Rodrigo Mekis Arnolds (23) no era el mejor alumno de su clase. Cada año sus papás hacían malabares para que pasara de curso. Sin embargo, "El Rono" siempre mostró interés y gran capacidad para los negocios. A los 13 años vendía skates; años después compró unas gallinas para vender huevos; y cuando se murieron compró ovejas.
A Rodrigo Mekis Martínez, su papá, también le iba muy mal en el colegio y a los 18 años comenzó con un negocio de autos que heredó cuando murió su padre, el ex alcalde de Santiago, Patricio Mekis. Por su propia experiencia, el patriarca sabía que en la universidad no estaba el futuro de su hijo. Esta razón lo motivó a proponerle que empezaran juntos un negocio.
Así nació La Pesca, empresa que vende pescados y mariscos frescos (atún, corvina, reineta, lenguado, ostras y machas, entre otros) y congelados (camarones, cangrejo, calamares, trucha, salmón, albacora, vidriola, etc.).
Partieron con un local en el sector de Las Pataguas. Hoy ya tienen una planta en Colina y otro local en Vitacura en Santiago (Región Metropolitana) y quieren seguir creciendo. "Nos encantaría pensar en un local por año, así a fin del 2010 estar instalándonos con un tercer local", cuenta Rodrigo Mekis Martínez. En lo inmediato, están a punto de comenzar la ampliación de su primera sucursal y de firmar con una marca de helados italianos para comercializarlos en sus locales, según lo publicado en El Mercurio.
Rápido ascenso
Cuando comenzaron hace cuatro años, "El Rono" iba a buscar la mercadería en su Volkswagen escarabajo. Ahora, ya tiene su propia camioneta. Y es que el volumen de esta empresa ha crecido exponencialmente. En un principio, compraban semanalmente un saco de ostras (de 60 kg) y ahora el pedido es de 60 sacos. Lo mismo pasó con los erizos: pasaron de 50 a 300 kg semanales. "Nunca nos imaginamos que el éxito iba a llegar tan rápido. Por eso, hemos tenido que pedirle ayuda al resto de la familia", agrega.
Así, los fines de semana el resto del clan Mekis llega como apoyo a La Pesca. Paula Arnolds, la mamá, se preocupa de limpiar ostras; Lucas (20) se encarga de la caja; Santiago (19) ayuda a sus hermanos; y dos niñitas, de 10 y 5 años, arman mallas de limones. "Nos hemos sabido complementar", dice el papá, quien se encarga de la parte administrativa. Por su parte, su hijo Rodrigo es el responsable de los productos. "Antes de empezar yo no conocía la concha de un loco y nunca había visto un erizo. De a poco me empecé a meter en el tema y ahora sé dónde están los mejores productos", explica el "Rono".
Pero La Pesca no es todo. Los Rodrigos están planeando nuevos negocios juntos. Tienen en carpeta construir un lodge, para lo que ya compraron un terreno en la Isla de Chiloé (Región de Los Lagos). Su idea es partir con tres cabañas y un club house que esperan construir el próximo año.