A principios de este año, SalMar compró su participación relativa disponible a precio fijo para el ajuste de capacidad en el sistema de semáforos, lo que implicaba aumentar a un total de 1.223 toneladas como máxima biomasa permitida (MAB), por un importe total de alrededor de USD $22,4 millones.
Sin embargo el viernes 30, recién pasado, SalMar anunció mediante un comunicado que ha optado por rescindir la compra.
En el comunicado explican que esto se debe al impuesto a la renta de recursos que el gobierno anunció el miércoles 28 de septiembre. Las propuestas implican, entre otras cosas, que el Estado adquiera el 40 por ciento de todos los flujos de caja de la empresa, y que la participación de los demás propietarios se reduzca correspondientemente.
Esto se expresa mediante el aumento del impuesto total para las empresas de acuicultura en Noruega del 22 al 62 por ciento. Si se adoptaran las propuestas, habría consecuencias importantes para las decisiones de inversión y la asignación de capital de la empresa en el futuro, explican desde SalMar.
“Esto ha creado una situación que hace que la empresa no encuentre justificado el pago de la referida remuneración. La sorprendente propuesta del gobierno, sin esperar la recomendación del comité fiscal designado por el gobierno, también ha llevado a una imprevisibilidad por parte de las autoridades que refuerza la necesidad de una evaluación más cercana de las futuras estrategias de inversión de la empresa”, concluyeron.
Fotografía: SalMar