Salmonicultura 2.0 no sólo implica reglamentos sanitarios y medioambientales que permitan una producción libre de enfermedades como el ISA, sino que también debe involucrar aspectos sociales. En conversación con AQUA, la productora de salmónidos Ventisqueros detalló el nuevo programa de Responsabilidad Social Empresarial (RSE) que implementará a fin de generar un compromiso con el entorno que los rodea.
Desde marzo y hasta noviembre del 2011, la salmonicultora Vestisqueros elaborará, junto con la Fundación Casa de la Paz, un proyecto que permita establecer un marco de sustentabilidad para la empresa y sus asociados, a través de los aspectos medioambiental, social y económico.
Se trata de un programa que constará de tres etapas, en la primera -con una duración de dos meses- se redactará un diagnóstico en donde se definirán los lineamientos estratégicos; en la segunda -con una duración de cuatro meses- se constituirá un comité interno transversal a la compañía, el cual elaborará la denominada Política Marco de Sustentabilidad que será validada por un panel de expertos, para luego proceder a su sociabilización al interior de la empresa; y en la tercera etapa -con una duración de dos meses- se diseñarán las herramientas de intervención, para finalmente entregar el plan piloto del programa.
"El equipo de Casa de la Paz, con más de 25 años de experiencia trabajando con empresas nacionales e internacionales, nos presentó un proyecto de RSE que nos permitirá declarar nuestros problemas, realizar la autocrítica y corregir los procesos desde el nivel interno. A partir de esto, podremos focalizar nuestro trabajo y ser un real aporte para las comunidades en donde operamos", explicó el gerente general de Ventisqueros, Andrés Fletcher.
La inquietud de la salmonicultora por reestructurar su acción social, nació tras los constantes requerimientos en términos de ayudas y donaciones que municipalidades y comunas aledañas a sus plantas y centros de cultivos les hacían llegar.
"Debíamos ordenar nuestra forma de asignar los recursos en función de las verdaderas necesidades, entendiendo que esta visión debía apuntar hacia el desarrollo sustentable en el ámbito social, medioambiental y económico. Que no sólo se trate de entregar dinero, sino construir capital humano", detalló por su parte la encargada de comunicaciones y RSE de Ventisqueros, Catalina Urzúa.
Fondos concursables
La idea de la salmonicultora es que los recursos se entreguen a modo de fondos concursables en los cuales los mismos trabajadores de la empresa puedan participar en la elaboración de proyectos. "Deseamos que cada uno de los empleados participe en la construcción de los proyectos y se sienta parte del concepto de sustentabilidad en la empresa", puntualizó Fletcher.
Según el ejecutivo, algunos de los trabajos que ya se encuentran en carpeta son "la construcción de redes de agua potable, realización de talleres educativos en distintas áreas del conocimiento, las artes y el deporte, entre otros".
Los proyectos serán evaluados por una comisión que pudiera estar compuesta por el Gobierno local, miembros de la empresa y representantes de las mismas comunidades beneficiadas.
"De la mano con Fundación Casa de la Paz, trazaremos un camino hacia la sustentabilidad que nos permita entender de mejor manera el concepto de la RSE como un elemento de impacto que traerá grandes beneficios a nuestra empresa", concluyó la encargada de RSE.
Fuente: AQUA