Según informa Intrafish, el profesor Terje Vassdal, del Norwegian College of Fisheries, planteó que Noruega y Chile deberían formar un cartel para las ventas de salmón. Vassdal sostiene que ambas industrias se beneficiarían de una cooperación mutua para limitar la producción mundial de salmones. En este sentido, se podría conseguir una ventaja en el mercado europeo con respecto a qué sucederá después de que expire el acuerdo de salmón el año próximo.
“Si Chile dobla la producción, tendremos una baja en los precios que podría fácilmente expandirse al mercado europeo”, expresó Vassdal al periódico Fiskaren. “Compañías productoras a gran escala que tienen participación tanto en Noruega como en Chile se beneficiarán con tal cooperación. El crecimiento excesivo en Chile podía conducir a que los precios del salmón caigan más rápido que los costos de producción”, sostuvo Vassdal, quien agregó que Europa exige que Noruega regule su mercadería de salmón al mercado y asegure su ventaja en la industria. “Noruega se lleva los costos, mientras otros comparten las recompensas”, concluyó.
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