El presidente del sindicato de tripulantes de Mejillones (II Región), Armando Aillapán, dijo que establecerán nuevas medidas de presión para lograr que sea autorizada la entrega de un cupo extraordinario por 50 mil t del recurso jurel.
Estimó que esta es la única manera de contener la grave crisis de este sector productivo, que se arrastra desde fines de junio y con una seguidilla de despidos y situación incierta para este sector laboral, informó El Mercurio de Antofagasta.
Comentó que hasta ahora no se conocen resultados positivos de las gestiones realizadas ante la Mesa de Trabajo Regional, que fue constituida por la intendenta Marcela Hernando como una manera de encontrar una salida a este angustioso problema.
Gestiones
Aillapán, acompañado del secretario de la organización gremial, Luis Aris y Arturo Olivares, tesorero, expuso una serie de planteamientos en orden a obtener la cesión de cupos extraordinarios que permitan poner término a los despidos de tripulantes.
Al respecto, precisó que alrededor de un centenar de trabajadores, en especial, a los denominados «de plazo fijo», no se les ha renovado sus contratos.
Afirmó que resulta imperativo agilizar las gestiones actualmente en curso para que se permita resolver a la brevedad esta verdadera emergencia que afecta a la pesca industrial de la II Región.
En su exposición, los dirigentes exteriorizaron su desagrado frente a lo que calificaron como «un absoluto desinterés de los parlamentarios u otras autoridades» por atender estas demandas del sector laboral que tiene sus bases en los puertos pesqueros de Mejillones y Tocopilla.
Impacto
De igual modo, afirmó que el universo de los trabajadores pesqueros industriales bordea las 800 personas de las cuales dependen numerosos grupos familiares con una fuerte incidencia en el desenvolvimiento económico de sus comunidades.
Hizo notar que junto con los tripulantes, existen otros trabajadores afectados tales como: vigilantes, rederos, descargadores, contratistas, así como un centenar de pescadores artesanales que hoy no pueden obtener capturas.
El dirigente dijo que el problema reviste una extraordinaria gravedad. Precisó que desde mediados de junio las plantas dejaron de operar.
Los dirigentes anunciaron sus propósitos de movilizarse tanto en el plano regional como en las esferas del nivel central y la sede del Congreso Nacional como una manera de obtener soluciones.
Inquietud
Las autoridades de Gobierno acordaron la constitución de una mesa de trabajo para analizar el problema pesquero con la participación de trabajadores, empresarios e instancias oficiales.
La idea es encarar el estudio de los aspectos sociales y técnicos con una perspectiva de corto, mediano y largo plazo. Sin embargo, a pesar que tenían previsto reunirse por estos días, tal situación no ha acontecido por lo que crece la inquietud entre los trabajadores de este sector productivo que temen la pérdida de sus fuentes de sustento.