El pasado domingo, el diario El Mercurio publicó una nota en relación con el alza que está sufriendo la harina de pescado producto de las menores capturas proyectadas por el principal proveedor a nivel mundial, Perú. Al respecto, el gerente general de Skretting Chile, Gabriel García, expresó lo siguiente:
«Si bien el año aún no termina, ya está claro que Perú no saldrá a pescar hasta el próximo año por lo que el déficit es concreto. Sobre el impacto real para el salmón chileno, la industria de los alimentos para peces se viene preparando desde hace muchos años para situaciones de escasez de esta vital materia prima. Para Skretting, el enfoque ha estado en generar Investigación y Desarrollo (I+D) y buscar reemplazos que nutricionalmente les permitan a los productores obtener los mismos resultados en crecimiento y estado de salud de los peces que una dieta tradicional con alto contenidos de harina de pescado. Así es como hemos aumentado nuestro conocimiento que nos permite estar tranquilos ante situaciones de escasez y de alta volatilidad de precios. Hoy tenemos una tecnología que denominamos MicroBalance que nos permite reemplazar con seguridad los micro-nutrientes esenciales que están presentes en la harina de pescado por otros de alta calidad cuyo origen es vegetal y animal, y que a la vez sean lo más rentable para nuestros clientes, quienes tienen que cuidar sus costos de producción. Es más, MicroBalance nos permite reemplazar no solo harina de pescado, sino también cualquier otra materia prima que tenga problemas en su abastecimiento.
Hoy conocemos muchísimo más la fisiología de los peces que diez años atrás y esto nos ha permitido reducir la dependencia de la harina de pescado, bajar la presión sobre un recurso natural que es limitado y valioso, aumentar la eficiencia en su uso y reducir la volatilidad de los precios de los alimentos. En 2004, por ejemplo, teníamos dietas hasta con un 44% de harina de pescado, siendo el promedio de inclusión de alrededor de 35%. Hoy, al 2014, el panorama es muy diferente. Nuestras dietas han reducido la inclusión de la harina de pescado hasta un 5%, con un promedio menor a 10%. Prácticamente un 85% de todas las dietas que producimos han sido formuladas con esta tecnología. La meta es continuar avanzando en I+D para entregar soluciones nutricionales de vanguardia.
Llevado a costos para los productores, nuestra tecnología MicroBalance representa ahorros importantes. Por ejemplo, si tomamos una empresa de tamaño mediano en nuestro país, que produce alrededor de 30.000 toneladas al año de salmón Atlántico, el ahorro por concepto de utilización de dietas sería de aproximadamente entre US$ 2.000.000 y US$ 2.500.000, considerando los actuales precios de esta materia prima»