Recientemente, fue publicado en Journal of Fish Diseases el artículo “The interaction between temperature and dose on the efficacy and biochemical response of Atlantic salmon to hydrogen peroxide treatment for amoebic gill disease”, de los autores James W. Wynne, Chris Stratford, Joel Slinger, Francisca Samsing, Megan Rigby, Russell McCulloch, Petra Quezada-Rodriguez y Richard S. Taylor.
Según lo informado, el peróxido de hidrógeno (H2O2) es un tratamiento comúnmente utilizado para una variedad de enfermedades parasitarias de peces, incluida la Amoebic Gill Disease (AGD). Si bien este tratamiento es parcialmente efectivo para reducir la carga del parásito, el H2O2 puede tener efectos perjudiciales en el huésped bajo ciertas condiciones. La temperatura y la concentración de la dosis son dos factores que se sabe que influyen en la toxicidad del H2O2. Sin embargo, su impacto en el resultado del tratamiento de AGD sigue sin estar claro.
Es por eso que los investigadores quisieron estudiar los efectos de la temperatura del tratamiento (8°, 12° o 16° C) y la concentración de la dosis (750, 1.000, 1.250 mg/L) sobre la eficacia del H2O2 para tratar la AGD. Se pudo demostrar que un tratamiento de baño de H2O2 de 20 minutos en todas las dosis redujo significativamente la carga parasitaria y la puntuación bruta de las branquias. De igual forma, la carga parasitaria y el puntaje branquial bruto fueron más bajos en el tratamiento de 1.000 mg/L realizado a 12°C.
A las altas combinaciones de dosis y temperatura, el H2O2 causó daños moderados en las branquias y un aumento significativo en la concentración plasmática de electrolitos (sodio, cloruro y potasio). En conjunto, el estudio demostró que las temperaturas más altas de tratamiento con H2O2 pueden afectar negativamente al huésped y no mejoran la efectividad del tratamiento.
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