Empresas líderes de la industria pesquera de Alaska, avaluada en US$6.000 millones, anunciaron su apoyo a una suspensión de las importaciones rusas de productos del mar en Estados Unidos, e instaron a Rusia a revocar su prohibición a la importación de alimentos estadounidenses, en vigor desde el 7 de agosto.
De acuerdo con lo detallado por Fis.com, las compañías pesqueras creen que tal medida no solo ejercería más presión sobre la vacilante economía de Rusia, mientras este país amenaza la estabilidad europea, sino que, además, apoyaría los recursos pesqueros sostenibles y de alta calidad de Estados Unidos.
La industria pesquera de Alaska está buscando ahora que la delegación de Alaska en el Congreso apoye la prohibición, como así también el Representante de Comercio de Estados Unidos. De igual manera, procura a través de esfuerzos diplomáticos poner fin de inmediato a la prohibición rusa sobre los productos del mar de Estados Unidos.
Entre las empresas que respaldan el embargo se encuentran Alaska General Seafoods, Alyeska Seafoods, Icicle Seafoods, North Pacific Seafoods, Ocean Beauty Seafoods, Peter Pan Seafoods, Trident Seafoods, UniSea, Westward Seafoods, y los miembros de la organización de Cangrejeros del Mar de Bering de Alaska.
«Nosotros no empezamos esta disputa, y esperamos que los rusos cancelen su embargo. No obstante, una prohibición estadounidense dará una señal al presidente (Vladímir) Putin de que Estados Unidos no va a quedarse de brazos cruzados mientras Rusia no tiene en cuenta el derecho internacional, y trata de forzar al mundo a ignorar sus transgresiones a través de acciones de represalia», dijo Terry Shaff, presidente y CEO de UniSea Inc.
Rusia es un mercado importante para los productos de mar estadounidenses, como las ovas de salmón, la merluza y el abadejo o colín de Alaska, entre otros. Estados Unidos, por su parte, es un mercado importante para los productos rusos, como el cangrejo, el abadejo de Rusia, el salmón, el caviar y otros.
La prohibición que el sector propone que implemente Estados Unidos permanecería en vigor hasta que Rusia rescinda su embargo a las importaciones estadounidenses, e incluiría mecanismos para suspender todas las importaciones de productos del mar de origen ruso, incluidas las capturas de pescado ruso que se transfieren a través de otros países, como China, antes de llegar a Estados Unidos. Fis.com detalló que productos del mar rusos por un valor de cientos de millones de dólares se venden en Estados Unidos cada año, y gran parte del pescado importado de Rusia procede de China.