(Pulso) En plena etapa de negociación se encuentra el síndico de la quiebra de Pesca Chile, Herman Chadwick, con la canadiense Cooke Aquaculture. Las conversaciones «más serias» comenzaron esta semana luego que el abogado culminara el período de recepción de ofertas. Lo anterior luego que Cooke lograra la «pole position» en la posta por lograr hacerse de los activos salmoneros en Chile de la fallida española Pescanova.
En caso de no prosperar las tratativas que lleva adelante el síndico, corresponderá seguir adelante con la siguiente oferta. Esto último es mirado con buenos ojos desde Marine Harvest, también interesado en comprar los activos.
La filiales en Chile de Pescanova generan gran atractivo debido a que tiene una serie de concesiones para producir en Magallanes.
Esta no es la primera vez que Cooke está interesado en ampliar su producción en Chile. Su primer intento estuvo ligado a la intensión de los hermanos Montanari de vender su participación en Invermar.
La alternativa abrió el apetito de los canadienses, quienes apostaron por conseguir el 54,07% de la salmonicultora. No obstante, las negociaciones no llegaron a buen puerto debido a la compleja situación financiera de la firma ligada a Invertec.
Si bien habían conseguido que gran parte de los bancos condonaran 30% de los pasivos totales, una de las entidades rechazó el acuerdo. Esto último provocó que finalmente las negociaciones no fructificaran.
Mientras, Pescanova en la última junta de acreedores de Pesca Chile logró frenar de manera temporal la venta de la filial pesquera.
El plan de la compañía es lograr un financiamiento que le permita no desprenderse de la compañía en Chile. De hecho, en la última reunión presentó una oferta por EUR$30 millones (US$41 millones) para capital de trabajo.
Para lograr este objetivo se formó una comisión de negociación integrada por los representantes legales de ambas compañías, abogados chilenos y el banco de negocios Lazzard. Pesca Chile, una de las filiales de Pescanova de la que controla el 51% del capital, fue declarada en quiebra el pasado 2 de mayo por el Juzgado Civil número 4 de Santiago.