Las exportaciones pesqueras (excluidos salmones) experimentaron un aumento del 19,3% en el periodo enero septiembre de este año, alcanzando un total de US$ 1.043 millones.
La Sociedad Nacional de Pesca (Sonapesca), manifestó que el incremento se explica por el mayor aprovechamiento de las capturas y por políticas generalizadas en el sector a partir del ordenamiento emanado de la Ley de Pesca. Resalta el aumento de un 31% de las exportaciones de conservas de jurel; de un 33,5% de las conservas de otros pescados; de un incremento del 23,7% en las exportaciones de pescado congelado y de un 21,5% en las exportaciones de algas.
La harina y el aceite de pescado representan hoy sólo un 37% del total de exportaciones y el producto se ha orientado a la elaboración de harinas prime y super prime, las que constituyen el principal insumo para la elaboración de alimentos para peces.
Un porcentaje creciente de estas harinas se destina al mercado interno para la alimentación de los salmones; el resto se dirige principalmente a los mercados asiáticos para la nutrición de crustáceos, anguilas y diversos peces de cultivo.
Sonapesca destacó que las capturas han disminuido un 14,3% en el transcurso del año, por lo que el aumento de las exportaciones -a pesar de la menor disponibilidad de materia prima- se debe al esfuerzo de las empresas por incorporar mayor valor agregado a sus productos. Como consecuencia, también se aprecia un crecimiento del empleo de un 6,8%.
Por contraste, el gerente general de la Sonapesca, Cristian Jara, recordó como un aspecto negativo el fuerte impacto de los precios de los combustibles, encareciendo las operaciones. “Durante gran parte del año, el grueso de la flota pesquera industrial opera en alta mar, en una área a veces superior a las 500 millas de la costa, por lo que el costo de los combustibles es relevante”
Buques factorías chinos
En otro tema, Jara lamentó que no se estén aplicando ni el texto ni el espíritu del Decreto Supremo Nº 123, el cual estableció la política de Estado de Chile para el uso de los puertos nacionales por parte de flotas pesqueras extranjeras.
“No tiene explicación que, luego de tres años de conversaciones con China, en las que este país no ha aceptado cooperar con Chile, y además ha reconocido que pesca jurel indiscriminadamente y en volúmenes crecientes, frente a las costas de Chile, se le siga otorgando facilidades portuarias. “El decreto señala que a cero cooperación con Chile corresponde cero facilidades portuarias”, dijo el gerente de la entidad gremial.
Ante esta excepción a favor de los barcos fábrica chinos, aclaró que el tema “no tiene nada que ver con el reciente TLC en el que, por lo demás, la inmensa mayoría de las exportaciones pesqueras a China quedaron con los planes de desgravación más lenta a diez años, mientras que las exportaciones chinas a nuestros mercados, quedaron con desgravación inmediata. A muy corto plazo nos podríamos encontrar en el escenario absurdo de que lo que los chinos pescan sin Dios ni ley, por medio de los barcos fábrica que han trasladado frente a nuestras aguas, podría ingresar al país con arancel cero, mientras que nuestros productores, que dan trabajo a miles de chilenos, no podrán competir porque deben pagar anualmente al estado patentes pesqueras que alcanzan hasta US$ 250.000 por barco, sin perjuicio de todas las demás regulaciones que se exigen a los armadores nacionales”.