Agentes del Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) de la Guardia Civil intervinieron un total de 7.688 Kg. de merluza de talla inferior a la exigida por la normativa vigente en siete empresas dedicadas al comercio de productos pesqueros de la ciudad de Alicante (España).
La merluza procedía de Italia, desde donde había sido transportada, ya congelada, por carretera hasta los almacenes de una empresa importadora que, a su vez, distribuía el pescado a otros mayoristas y éstos, a establecimientos de Alicante para su venta al público. Así informó ayer el sitio www.consumaseguridad.com.
El pescado se encuentra en este momento inmovilizado en las compañías donde fue decomisado, a disposición de la Dirección Territorial de la Consejería de Agricultura, Pesca y Alimentación de la Generalitat valenciana, que ya recibió las actas levantadas al efecto.
Los ejemplares tenían una talla inferior a 20 cm., que es la mínima exigida por la normativa, y se hallaban almacenados en cajas de cartón de entre 15 y 17 Kg. cada una.