El fabricante de vacunas para peces de origen noruego, PHARMAQ, está nadando contra la corriente. Mientras otras empresas de biotecnología del país escandinavo se están trasladando a otras naciones con costos menores, esta compañía decidió realizar la mayor inversión de su historia en la producción de vacunas para peces a través de una nueva instalación en Klofta, la que estará dedicada a la producción de antígenos virales.
«Para nosotros, esta es una decisión estratégica que mejora nuestra capacidad de suministrar cada vez más productos para la industria acuícola», sostuvo el gerente general de PHARMAQ, Morten Kr. Nordstad.
Actualmente, PHARMAQ arrienda locales para la producción de virus en el Instituto de Salud Pública de Noruega, ubicado en Oslo. Sin embargo, este está a punto de cerrar sus puertas para la producción de medicamentos estériles, de modo que ya se ha pronosticado que las empresas de biotecnología noruegas se trasladarán al extranjero cuando ello ocurra.
«Desde un principio, hemos mantenido la opinión de que no existen otras instalaciones adecuadas en Noruega. Primero consideramos instalarnos en el extranjero, pero finalmente decidimos que PHARMAQ invertirá en la reconstrucción de las instalaciones de Klofta, en el condado de Akershus. Después de ello, arrendaremos las instalaciones de Oslo Pensjonsforsikring (OPF), la compañía de seguros que es propietaria del edificio. Se estima que la adaptación costará por lo menos NOK$150 millones (US$18 millones), monto que será compartido entre el dueño y el arrendatario. Se trata de un proyecto considerable y la inversión es la más grande de la historia de nuestra compañía», comentó Nordstad.
Aunque invertir en Klofta resulta más caro que realizarlo en otros países, la empresa ha llegado a la conclusión de que mantener instalaciones de Investigación y Desarrollo (I+D) cerca de su área de producción será fundamental para contar con una rápida capacidad de reacción e innovación.
«Tendremos instalaciones nuevas muy bien adaptadas a nuestros procesos de producción. Esto mejorará nuestra capacidad para desarrollar y suministrar rápidamente nuevas vacunas al mercado», destacó el ejecutivo.
Para el representante de PHARMAQ, la innovación juega un papel esencial en la empresa. «La industria acuícola seguirá creciendo, ya que hay una demanda no satisfecha de productos del mar que será suplida por esta actividad. Sin embargo, el crecimiento del rubro se ve obstaculizado por los desafíos en términos de salud de peces, por lo cual las vacunas son y serán parte fundamental en la solución a estos problemas», expuso Nordstad.
En los últimos años, PHARMAQ ha producido vacunas nuevas para peces todos los años y hasta cuatro nuevas vacunas en su mejor año. En 2014, vendió casi mil millones de dosis de diferentes productos. «Cada año, destinamos casi un quinto de las ganancias a I+D. Esto nos ha dado la capacidad de lanzar productos nuevos en forma frecuente. Queremos seguir contribuyendo al desarrollo y crecimiento continuo de la acuicultura», expresó el ejecutivo.
En tanto, el director de inversiones de OPF, Kjetil Houg, afirmó que «Oslo Pensjonsforsikring está muy complacido de tener a Pharmaq como arrendatario de sus instalaciones en Klofta. Estamos estableciendo una asociación a largo plazo, sentando las bases para la inversión de recursos considerables para la adaptación del edifico. Nuestro objetivo es que OPF continúe siendo un buen socio de los arrendatarios actuales y futuros».
La planta de Klofta tendrá la capacidad de producir millones de dosis de vacunas al año, empleando a unas 20 a 25 personas en una instalación de 2.500 m2. Se espera que las operaciones comiencen en la primera mitad de 2017.