Ante la reciente denuncia de algunas organizaciones sociales de la Isla de Chiloé frente al hallazgo de materiales provenientes de la mitilicultura en un terreno de la localidad de Quinched, en la comuna Chonchi, la Asociación de Mitilicultores de Chile (AmiChile) informó que tomó conocimiento del caso y se está gestionando la ayuda necesaria para dar una pronta solución.
Según la información recabada, un productor de choritos de la provincia, realizó el recambio de sus boyas utilizadas para la producción de mitílidos, sacando del agua los antiguos artefactos de plumavit para cambiarlos por boyas de plástico, que son más amigables con el medio ambiente. Los desechos sacados del agua (plumavit) fueron dispuestos en un terreno familiar, a la espera de poder acceder a una correcta disposición final o posibilidad de reciclaje. Fue en esta situación que el material voluminoso fue detectado y generó, con toda razón, preocupación entre vecinos y autoridades.
Sobre este asunto, la gerente general de AmiChile, Yohana González, sostuvo que “cuando conocimos el caso, fuimos inmediatamente al sector en cuestión y se constató que se trataba de una pésima gestión de almacenamiento de boyas de plumavit, pero no se observaron residuos orgánicos ni otro tipo de elementos inorgánicos como bolsas plásticas y otros que se nombran en la denuncia; de hecho no habían ni han habido pájaros, según nos expresaron algunos vecinos”. Añadió que si bien la intención del mitilicultor fue migrar hacia el uso de un mejor material de flotación, como es el plástico, “los residuos generados no fueron dispuestos ni acopiados correctamente”.
“Considerando que AmiChile posee una fuerte política medioambiental y social, estamos orientando a los responsables sobre la correcta disposición de estos residuos y al mismo tiempo vinculándolos con GreenSpot, con quienes tenemos un convenio de gestión de economía circular que transforma el plumavit y plásticos utilizados en la acuicultura en prototipos de nuevos productos (maceteros, composteras, moldajes de construcción, mobiliario y juegos para niños en parques y plazas, pediluvios), entre otros”, precisó la ejecutiva.
Yohana González destacó que situaciones como esta evidencian un problema de fondo que se vive en la Isla de Chiloé – y la región de Los Lagos en general–, que tiene ver con la falta de rellenos sanitarios o lugares de disposición final para residuos industriales. “Este tema lo venimos trabajando desde hace mucho tiempo, pero aún no ha tenido solución. Esperamos que pueda ser resuelto a la brevedad, para evitar que episodios como estos se repitan en el futuro”, concluyó.
Fotografía: Corfo