Un nuevo informe independiente afirma que los proveedores de soja brasileña para el salmón noruego han logrado su objetivo de una cadena de suministro libre de deforestación y conversión. Un movimiento descrito por Rainforest Foundation como un compromiso histórico y un cambio de juego en Brasil.
Hace un año, la industria del salmón anunció que sus proveedores de Brasil habían decidido volverse 100 % libres de deforestación y conversión. Un compromiso que extiende su compromiso libre de deforestación a todo el negocio de soja de su proveedor, también fuera de la cadena de valor del salmón. WWF y Rainforest Foundation dijeron entonces que este era un punto de referencia para inspirar a otros sectores mundiales de proteínas animales, pero querían un sistema sólido e independiente para garantizar que las empresas cumplieran con las obligaciones.
“Es una gran noticia que se confirme por primera vez que los productores de soya brasileños están completamente libres de deforestación y conversión en todas sus operaciones”, dijo Nils Hermann Ranum, jefe del programa Drivers of deforestation de Rainforest Foundation Norway.
“Es necesario exigir que los proveedores estén completamente libres de deforestación para detener la deforestación en curso en Brasil. Las empresas del sector privado tienen la responsabilidad de evitar contribuir a la deforestación y al daño ambiental, y la industria del salmón noruega y sus proveedores dan un ejemplo importante que otros productores de alimentos deben seguir”, agregó Ranum.
Técnicas satelitales modernas
La fundación de certificación internacional ProTerra estableció un método de monitoreo para verificar que ningún agricultor que hubiera talado algún bosque pudiera vender soja a los proveedores.
Para demostrar la eficacia del sistema, los contratos y los nombres de las listas públicas de responsabilidades sociales y ambientales se seleccionaron al azar y se compararon con los nombres en el informe de recepción de soja de la empresa. Usando técnicas satelitales y listas de embargo, el informe de auditoría, recientemente publicado, confirma que la cadena de suministro de soya se ha vuelto libre de deforestación y conversión.
El informe de auditoría también verificó que los agricultores no tuvieran ningún trabajo relacionado con la esclavitud o el trabajo ilegal y que no hubiera superposiciones de agricultura con tierras indígenas.
“Este proceso transparente muestra que nuestros proveedores han logrado una cadena de suministro 100 % libre de deforestación según lo prometido. Esto se suma al hecho de que ya hemos obtenido soja libre de deforestación para nuestra producción de piensos durante varios años”, indicó la directora de tecnología y sostenibilidad de Mowi, Catarina Martins.
“Es alentador ver que nuestra cooperación proactiva con los proveedores en materia de sostenibilidad y transparencia da sus frutos”, añadió Martins.
Más de 3 millones de hectáreas y cinco mil proveedores directos
Hay tres empresas que suministran soja a la industria del salmón noruega. Dos de ellos, Caramuru y CJ Selecta han pasado por las auditorías. La tercera empresa, Cervejaria Petropolis-Imcopa, está en un cambio corporativo y ahora se les realiza una auditoría separada. No hubo no conformidades observadas por el Auditor, solo oportunidades de mejora, según lo informado.
Esta cadena de valor brasileña incluye 5.136 proveedores directos que cultivan 2,4 millones de toneladas de soja en tierras que cubren más de 33.294 km2. En 2021, 24 proveedores fueron bloqueados por no cumplir con los criterios.
Los auditores independientes también probaron la solidez y eficacia del sistema al verificar una muestra de 50 nombres elegidos al azar de las listas públicas de proveedores que incurrieron en responsabilidades sociales y/o ambientales. Esta lista se comparó con la lista de proveedores de soja en los sistemas. No se encontró relación o conflicto entre los nombres de los proveedores de soja y los seleccionados aleatoriamente de las listas públicas consultadas.
No hubo no conformidades observadas por el Auditor, solo oportunidades de mejora verificadas para cada empresa, las cuales no impactan en la eficiencia del sistema y ya estaban siendo trabajadas por las empresas auditadas.
Fotografía: Mowi