En el contexto de los incendios forestales, trabajadores de la empresa Orizon, contratistas y vecinos de las comunidades locales se unieron para colaborar con la caleta de pescadores Punta Lavapié, en Arauco.
La compañía pesquera organizó la campaña 1+1, que comprometía duplicar cada aporte recibido. En total se logró reunir más de 1.300 kilos de alimentos y la empresa sumó otros 5.000 kilos, llegando a un total de 6.300 kilos.
La región del Biobío ha sido una de las más afectadas por los incendios forestales, que se han expandido por la zona centro-sur del país.
De acuerdo al último balance de las autoridades más de 197.845 hectáreas han sido consumidas por las llamas y se registran cientos de damnificados.
Muchas de las localidades fuertemente dañadas son cercanas a Coronel y ya están en la etapa de la reconstrucción, recibiendo sus primeras viviendas de emergencia y reuniendo todos los esfuerzos y refuerzos necesarios.
“Hay muchas familias afectadas, entre ellas de pescadores artesanales que viven del mar, y que son de comunas vecinas que están en pleno proceso de reconstrucción. Ellos necesitan toda la colaboración posible y como empresa nos pusimos a disposición. Sabemos que en Coronel se puede reunir ayuda y ha sido nuestro compromiso histórico cooperar para canalizarla”, señaló Allan Carrasco, subgerente de Sostenibilidad de Orizon, quien agradeció la participación a colaboradores, a empresas contratistas, y vecinos de Villa Alegre, población Libertad, Cerro Obligado y Carlos Prat de Coronel.
Desde Coronel salieron equipos de colaboradores de la compañía y voluntarios en camiones y vehículos hacia Arauco para finalizar el despliegue con la entrega de los alimentos directamente a dirigentes y vecinos de la zona afectada.
Fotografía: Orizon