El presidente de la Asociación de la Industria del Salmón de Chile A.G. (SalmonChile), Felipe Sandoval, resaltó que la adecuada coordinación con el Servicio Nacional de Pesca y Acuicultura (Sernapesca) y Relaciones Exteriores de Chile, ha permitido minimizar el impacto de las restricciones impuestas por el gobierno argentino para el transporte de productos salmonídeos por el paso Cardenal Antonio Samoré en Puyehue, Provincia de Osorno, Región de Los Lagos.
Lo anterior, debido a la vigilancia sanitaria dispuesta por el país trasandino que se mantiene libre del virus de la Anemia Infecciosa del Salmón (ISAv), y por tanto estableció una barrera sanitaria bajo las directrices del Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa), enfatizando en el transporte de mercadería de riesgo.
De acuerdo con lo informado por Radio Bío-Bío, para el presidente del gremio salmonicultor «es muy relevante mantener el tránsito de los camiones, dado que parte importante de la carga que pasa por el paso Cardenal Samoré abastece el mercado brasileño y argentino, mientras que otro volumen de las exportaciones es destinado hacia China».
En la disposición del Senasa -organismo a cargo de la vigilancia- se establece que para la importación de salmónidos refrigerados y congelados hacia Argentina, será necesario ingresar por el paso internacional Pino Hachado o puntos fronterizos localizados hacia el norte.
En tanto, para cualquier destino por territorio trasandino o nexo Chile-Chile, se estableció una zona de libre paso por Cardenal Antonio Samoré en la comuna de Puyehue, siempre y cuando se certifique que los lotes transportados provengan desde una zona en constante monitoreo de la autoridad competente, o de centros libres del virus ISA en un radio de 10 kilómetros entre otras observaciones.
En ese sentido, Felipe Sandoval precisó que «lo anterior responde a medidas transitorias y en evaluación por parte de las autoridades argentinas».
Según lo informado por InfoTrade, a noviembre de 2014 se exportaron a Brasil casi 80.000 toneladas que reportaron retornos por US$515 millones. Mientras que a China, detalló por su parte Sandoval, «existe un incipiente mercado que requiere de rutas libres para proyectar el crecimiento del sector».