La empresa de servicios acuícolas Servinets Ltda. emitió una declaración donde asegura que el estero Chinchihuapi, que cruza el sitio arqueológico Monte Verde, ubicado en la comuna de Puerto Montt, región de Los Lagos, «jamás fue contaminado» por la compañía y que el evento ocurrido el 10 de junio del año pasado fue «solo una contingencia ambiental fortuita producto de un derrame de aguas lluvias».
En dicha fecha, se produjo un escurrimiento de agua a un terreno vecino a la empresa en el sector La Pirámide, Trapén, lo que generó una denuncia por contaminación por parte del municipio puertomontino, la cual fue corroborada por la Superintendencia del Medio Ambiente (SMA).
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Lorena Alarcón, representante de Servinets, argumentó que lo que ocurrió en esa ocasión «fue que una canalización de aguas lluvias obstruida accidentalmente, colapsando, por lo que el agua se dirigió hasta el sector donde se almacenaban los lodos deshidratados, los que derramaron a un antiguo pozo de lastre. Este pozo igual se vio sobrepasado, por lo que una parte escurrió al terreno vecino».
Añadió que cumplen con «todas las disposiciones medioambientales y sanitarias vigentes, por lo que lo sucedido fue eventual. Además, apenas ocurrió el hecho, se tomaron una serie de medidas para controlar la contingencia y se cumplió a cabalidad con todas las observaciones efectuadas por la autoridad, incluyendo la paralización de faenas», afirmó la ejecutiva.
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Persecución
Por otro lado, Lorena Alarcón puntualizó que se sienten perseguidos por la municipalidad. «Nuestro personal teme por esta persecución y por su bienestar, ya que su fuente laboral podría verse afectada». A lo que agregó: «Como empresaria es más difícil tratar de surgir, porque por ser mujer se ataca más».
Paralelamente, la ejecutiva sostuvo que lo que debería investigarse son qué medidas de mitigación ha adoptado el municipio para evitar el crecimiento del caudal del estero Chinchihuapi, «ante la proliferación de fosos de aguas lluvias de los proyectos de parcelación autorizados aguas arriba y que están socavando los bordes del estero frente al sitio arqueológico».