La Facultad de Ciencias Veterinarias y Pecuarias (Favet) de la Universidad de Chile, el Centro Colaborador para la Gestión de Antimicrobianos en la Acuicultura (CASA) de la Organización Mundial de Sanidad Animal, y el Instituto Tecnológico del Salmón (Intesal) de SalmonChile, realizaron un encuentro que reunió a especialistas en acuicultura, salud pública y medio ambiente para discutir desafíos y soluciones relacionadas con la resistencia antimicrobiana (RAM) en la producción acuícola desde una perspectiva One Health.
El gerente general del Intesal, Esteban Ramírez, valoró el desarrollo de la instancia, destacando el enfoque Una Salud y su importancia para el sector. “En la acuicultura siempre estamos trabajando en la RAM respecto de nuestra bacteria (SRS), pero no hacemos esta mirada más global para entender que nosotros solo somos una parte de un problema que es mucho más complejo. Que tiene que ver con la salud animal con el medio ambiente y con la salud de las personas, de manera mucho más amplia. El objetivo de esta actividad en particular es, justamente, tomar este tema pero con esta mirada mucho más amplia”.
Ramírez adelantó que no es la última actividad del año del Intesal, ya que próximamente tendrán otra actividad de ciencia junto con el Dr. Eric Goles con una charla magistral, donde también esperan presentar los proyectos que durante el año lograron articular en torno al Plan de Ciencia de la institución.
En tanto, Alicia Gallardo, asesora en acuicultura de la Organización de Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) y la OMSA, comentó respecto al enfoque Una Salud que “es muy favorable para nosotros, para tener un enfoque único e integral a nivel del país considerando también la gobernanza de nuestra institucionalidad”.
Añadió que los códigos sanitarios tanto acuáticos como terrestres que promueve la OMSA abordan en su Sección 6 el uso responsable de antimicrobianos. “El código terrestre ha trabajado mucho en su comisión en abordar los desafíos de Una Salud para entregar aspectos más concretos para apoyar el uso responsable de la medicina veterinaria en los sistemas de producción terrestre. Sin embargo, en el código acuático esta sección no ha sido aún abordada, y probablemente sea el desafío de la próxima comisión de animales acuáticos que se va a elegir en mayo del próximo año”, aseveró.
Vigilancia integrada
Posteriormente, Lisette Lapierre, académica de Favet, especialista en programas de vigilancia integrada de RAM para animales terrestres y acuáticos, señaló que estos programas se realizan “armonizando los tamaños de las muestras y los protocolos del tipo de muestra, bacteria y antibióticos. También vigilando los mismos antibióticos para saber si un tipo específico de resistencia se está extendiendo. Ello además entregando un análisis estadístico de los datos recopilados armonizado para poder compararlos entre los distintos programas. Y entregando recomendaciones y mejoras para generar normativas en forma conjunta”.
Adicionalmente, Daniela Farías, bióloga marina del Monterey Bay Aquarium de Estados Unidos con dominio en ecosistemas acuáticos, comentó que “aún hay brechas de conocimiento, donde se desconoce el efecto que pueden tener los escapes de peces, organismos no objetivos, ciclos biogeoquímicos y producción primaria. Falta recopilación de datos, seguimiento de estos y análisis de datos. Junto con metodologías utilizadas para evaluaciones de impacto”.
En tanto, Juan Carlos Hormazábal, experto en enfermedades infecciosas del Instituto de Salud Pública, afirmó que, “la cooperación de los actores de la región, gubernamentales, del ámbito científico/academia, entidades de apoyo a la investigación nacionales e internacionales y OPS/OMS/FAO/OMSA es fundamental”. Agregando que “el fortalecimiento del diagnóstico del laboratorio y las acciones de prevención y control de infecciones en el ámbito humano y animal son clave en las estrategias frente a la RAM. La educación de los profesionales de la salud humana animal, ambiental y la comunidad en general es fundamental para esta difícil tarea”, afirmó Hormazábal.
Disminuye el uso de antimicrobianos
Luego, Mónica Rojas, del Servicio Nacional de Pesca y Acuicultura (Sernapesca), expuso sobre los avances del Plan Nacional contra la RAM. “La publicación oportuna de datos de uso de antimicrobianos por ciclo, especie y empresa genera un potente incentivo para la generación de alianzas público-privadas con foco en la reducción”.
Además, Mónica Rojas destacó que “en el primer semestre de 2023 se observa una reducción del uso de antimicrobianos del 22,9% respecto del mismo período del año 2022. Con 184,1 toneladas en 2023 vs las 239 toneladas en 2022”, comentando que, “el enfoque multidisciplinario bajo Una Salud es la forma de abordar el problema de la RAM”.
En tanto, la situación sanitaria en Perú con Carla Villena, del Organismo Nacional de Sanidad Pesquera (Sanipes), donde destacó el trabajo para la prevención de la RAM en la acuicultura de dicho país. “El objetivo general es determinar las estrategias para la prevención de la RAM en los principales recursos y productos hidrobiológicos provenientes de la acuicultura peruana. Tales como trucha arcoíris, langostino blanco (camarón), concha abanico (ostión) y tilapia”.
Ello junto con “implementar los métodos diagnósticos para la caracterización fenotípica serotípica y genotípica para determinar la sensibilidad a los antimicrobianos y los genes de resistencia en los laboratorios de Sanipes”.
Finalmente, se trató sobre la experiencia en la reducción del uso de antibióticos en salmonicultura con Pablo Ibieta, del Proyecto Pincoy, que apunta a generar una “receta” para la producción de salmones de forma sostenible, reduciendo el uso de antimicrobianos. “En todos los años en que se realizaron diferentes centros piloto se logró un Manual de Buenas Prácticas, donde se recogen todas estas indicaciones en forma clara de cómo producir salmones más robustos y con menos consumo de antibióticos”.
“Y, en los últimos años, hemos hecho análisis a nivel de jaula y hemos corroborado que muchas de estas estrategias, como utilizar una genética adecuada, utilizar una estrategia de vacunación adecuada junto con una estrategia adecuada de antiparasitarios, junto con la estrategia de pesquisa de los brotes y tratamientos oportunos son los que han hecho posible la reducción del uso de antibióticos. Ya que el año 2022, de acuerdo con las cifras del informe de Uso de Antimicrobianos de Sernapesca, el promedio de las empresas Pincoy está en un 45% más bajo que el resto de las empresas no Pincoy. Ese es un resultado claro”, concluyó Pablo Ibieta.
Fotografías: B2B Media Group.