Hasta la región de Coquimbo llegó el presidente del Sindicato de Tripulantes y Ramos a Fines de la Industria Pesquera y presidente de la Federación de Tripulantes “Fetrinech”; Sergio Vera González, para reunirse con los representantes jibieros de la cuarta región.
En la oportunidad, el representante de los tripulantes expresó y argumentó los problemas y la preocupante cesantía que está atravesando su región en el último tiempo. Mencionó el cierre de Fanaloza, el robo de madera y cierre de empresas forestales y ahora la amenaza de cerrar Huachipato. “Es por esto que estamos muy preocupados, ya que en el sector pesquero industrial se han perdido muchos empleos en las últimas décadas, cada vez que se promulga una ley de pesca, son cientos y miles de puestos de trabajo que perdemos”, aseguró.
Sergio Vera, al igual que lo hizo junto a los trabajadores de la planta de proceso de la Industria pesquera, al reunirse con los representantes jibieros del Bíobío; se reunió con dirigentes artesanales en Caleta Guayacan, principalmente con Pascual Aguilera, presidente de la Coordinadora de la jibia en la región de Coquimbo, y representante de la jibia por Chile en Calamasur, organismo internacional.
El principal motivo de la visita es plantear que una buena alternativa de trabajo para ambos sectores, sería autorizar a la Industria Pesquera a capturar jibia durante un periodo de tiempo determinado.
Esto sería autorizado solo en la región del Biobío, con red de arrastre de media agua, la captura dirigida exclusivamente a consumo humano y respetando la salida de la flota artesanal, todo el tiempo que las condiciones climáticas se lo permitan, entre otras medidas que se pueden acordar. La intención es recuperar los empleos que perdieron los trabajadores de la industria pesquera de la región, y que los compañeros artesanales jibieros recuperen sus capturas de la especie, quienes también la están pasando muy mal al no tener a quien entregar su producto para proceso. Y algo muy importante, es no perder la cuota de jibia que tiene asignada Chile en la O.R.P., debido a que ésta se asigna por historia de pesca; y entregársela a China o Perú.
Desde el organismo comentaron que una vez finalizado este periodo de tiempo autorizado para que la industria pesque jibia, debe existir un crecimiento y recuperación de los empleos de los trabajadores de la industria, como también un aumento de captura y desembarque de jibia en el sector artesanal del Biobío. Éste debe ser un motivo fundamental y potente para seguir autorizando la captura de la especie.
Pascual Aguilera, después de escuchar al representante de los tripulantes, comenzó diciendo que él, y está convencido que ningún pescador artesanal quiere dejar sin trabajo a un compañero trabajador del mar, sea del sector que sea. “Vivir del mar está muy difícil y todos tenemos familias que sacar adelante”, manifestó.
“En segundo lugar, como miembro titular y representante de Chile en Calamasur, en donde he asistido a todas las reuniones de la O.R.P., por ahora no me preocupa una disminución de cuota de jibia, porque en estas reuniones pesqueras internacionales, no se ha abordado este tema aún con profundidad, pero tampoco niego que en un futuro no muy lejano se ponga esta discusión en la mesa y se pretenda realizar una nueva distribución de la jibia en nuestra región del pacífico sur, y debemos estar preparados”, expresó.
“Por eso me atrevo a escuchar a los trabajadores de la industria, y a lo mejor no sería malo que se sienten los verdaderos actores que capturan jibia a conversar de manera franca y sincera, para ver qué es lo que se quiere y puede conseguir”, añadió.
“No estoy en condiciones de dar una respuesta a favor o en contra de esta idea, porque si es una alternativa de crear empleos para los trabajadores de la industria y para mejorar las capturas, desembarques y mejorar la calidad de vida de mis compañeros y pares artesanales que no la pasan bien en la región del Biobío, primero deben ser ellos quienes lleguen a un buen y claro acuerdo”, sostuvo.
Agregó que “soy directo en decir que son ellos, los pescadores artesanales jibieros, trabajadores y la industria los que deben ordenar su casa, y exclusivamente en su región. En donde saquen conclusiones positivas y que vayan en directo beneficio de la especie, de las personas y del país”.
Aguilera terminó diciendo que mientras Biobío no presente una propuesta clara como región y con apoyos políticos, no pueden expresar una opinión.
Finalmente, los dirigentes se propusieron seguir conversando y sumar representantes que capturen la especie, para crear las confianzas que se necesitan para llegar a sinceros y buenos acuerdos como trabajadores y hombres de mar.
Fotografía: Fetrinech