“Arica siempre Arica”, dice parte del himno de la ciudad ubicada en la región de Arica y Parinacota y que por estos días se está convirtiendo en el centro de la actividad cultivadora chilena “dada la gran cantidad de actores presentes”, dijo durante la inauguración uno de los principales responsables del VII Congreso Nacional de Acuicultura, Renzo Pepe Victoriano. Dentro de los más de 150 asistentes al evento -que comenzó este martes y finaliza el viernes- se encontraban autoridades, empresarios, científicos y estudiantes.
Pero la persona encargada de abrir la reunión organizada por la Sociedad Chilena de Acuicultura, junto con la Universidad Arturo Prat (UNAP), fue la intendenta regional, María Loreto Letelier, quien se refirió a los tres ejes de desarrollo de la zona: “turismo, agricultura y servicios. Sin embargo, nos ha parecido muy interesante la línea de trabajo que tiene la Universidad Arturo Prat en acuicultura, área de desarrollo económico que queremos para nuestra región”.
Precisamente, Renzo Pepe Victoriano aseveró que el motivo de elegir Arica, en el extremo norte del país, para la realización del encuentro internacional, fue que “la acuicultura es un eje estratégico económico fundamental para la región y, además, porque reúne diversas condiciones para los cultivos de diversos recursos hidrobiológicos”.
En tanto, el presidente de la Sociedad Chilena de Acuicultura, Antonio Vélez, remarcó que “el desarrollo de la acuicultura ya se inició en esta región”, gracias a la producción de algas o, incluso, truchas en zonas precordilleranas, entre otros. De igual forma, llamó a los países vecinos, como Perú, a trabajar en conjunto para conformar una gran macrozona acuícola que permita entregar proteínas sanas a la población frente a las menores pesquerías.
En el mismo sentido, la vicerrectora de Investigación, Innovación y Postgrado de la UNAP, Margarita Briceño, destacó el aporte que puede realizar la actividad acuícola en el desarrollo económico y alimentación de las personas de la región. “El objetivo es que se desarrollen los territorios en sus potencialidades. Es lo que deseamos que se logre en este evento”, concluyó la autoridad académica.
Los desafíos de la industria del salmón
La charla principal estuvo a cargo del emprendedor, líder gremial y asesor, entre otras actividades, Alfredo Valenzuela, quien hizo un repaso histórico de la actividad salmonicultora en Chile y que comenzó en 1865 gracias a la iniciativa del empresario nacional, Luis Cousiño, quien importó ovas desde Europa.
Años más tarde, precisamente en 1897, el Estado se insertaría en la actividad gracias a la contratación de un piscicultor escoses, quien asesoró en la implementación de cultivos de salmónidos.
En el intertanto, en Chile se fueron construyeron diversas pisciculturas y/o se efectuaron diversas iniciativas nacionales e internacionales de ranching, entre otros, para dar forma a una actividad que cosecha más de 800.000 toneladas anuales y logra retornos por sobre los US$4.600 millones.
El experto realizó un repaso a las últimas contingencias que ha vivido la actividad, como la marea roja, hundimiento de wellboats o escape de peces, concluyendo que es una actividad altamente positiva para el país pero que tiene una imagen adversa. “La industria debe darse el trabajo para explicar las cosas hasta que sea necesario”, expuso Valenzuela.
Dentro de los desafíos que enfrenta la actividad, el asesor apuntó a la relocalización de las concesiones, reducir los costos productivos, mejorar los indicadores y “disminuir el consumo de antimicrobianos”.
Se puede destacar que el presidente de la Sociedad Chilena de Acuicultura, Antonio Vélez; junto con la vicepresidenta, María Isabel Toledo, entregaron a Alfredo Valenzuela un reconocimiento al aporte que ha realizado a la industria acuícola nacional a través de diferentes ámbitos.
