(El Mercurio) A un año de la implementación de la ruta marítima que une a las regiones de Aysén y Magallanes, entre Puerto Yungay y Puerto Natales, la empresa naviera a cargo del tramo decidió invertir US$9 millones en un nuevo transbordador antes de que se cumpla el contrato que suscribió con el Estado, con un subsidio mensual de $200 millones, debido a la alta demanda del servicio.
Desde mayo del año pasado hasta marzo de 2017 se movilizaron 5.115 pasajeros (1.178 residentes y 3.937 no residentes) y cerca de 1.900 m {+3} de carga. El principal flujo de pasajeros se presentó en los meses de verano con turistas nacionales y extranjeros, «con una ocupación full y medio sobrepasados», reconoce Alejandro Kusanovic, gerente de Tabsa, la empresa armadora del ferry.
Por ello, ante el escenario de una creciente demanda, Tabsa resolvió invertir en una nueva embarcación de 100 metros de largo, que se construye en China, con capacidad para 250 pasajeros, que tendrá más comodidades para el viaje de 42 horas. Esta funcionará desde 2019 y reemplazará al «Crux Australis», construido en 2008 en Valdivia, para 145 pasajeros.
Los comerciantes y pequeños productores de las localidades de Caleta Tortel y Puerto Edén son los primeros en beneficiarse con el viaje semanal entre ambos puntos. «Del punto de vista social, ha sido una experiencia enriquecedora, porque existe una continuidad de la Carretera Austral, repercutiendo también a favor de las localidades más próximas, como Cochrane y Villa O’Higgins», comenta Kusanovic.
Los lugareños mejoraron sus posibilidades de sacar con mayor regularidad sus producciones madereras (Caleta Tortel) y de mariscos (Puerto Edén). «Esto ha sido muy bueno para nosotros, porque llega más gente y podemos vender nuestras artesanías. Además el ferry atraca en Puerto Edén, algo que no ocurre con el transbordador que pasa entre Natales y Puerto Montt (región de Los Lagos)», resalta Isabel Negüe, dirigenta de la Corporación de Desarrollo de Puerto Edén.
Kusanovic aclara que la nueva nave solo reemplazará a la «Crux Australis», porque, «como ya están fijadas las tarifas y los ingresos no son tan relevantes en la matriz de costo, no ayuda a cubrir los gastos de operación para tener otra barcaza en el tramo. Lo que sí ocurrirá es que vamos a tener otra barcaza más grande, y con mayores comodidades».
El alcalde de Villa O’Higgins, Roberto Recabal, resalta el valor de esta nueva ruta marítima, pero también critica que la nave llega en la madrugada a Puerto Yungay y allí no hay mayores facilidades para los visitantes. «Si un turista llega en ese ferry, debe esperar hasta el domingo para abordar otra barcaza e ir a O’Higgins. Eso se tiene que mejorar», explica Recabal.
El intendente de Magallanes, Jorge Flies, destaca que esta ruta surgió en el marco del Plan de Desarrollo de Zonas Extremas y es fruto del reconocimiento del Gobierno por atender sectores aislados. «Hemos terminado con un aislamiento histórico que tenía Caleta Tortel, como punto final de la Carretera Austral. Creemos que hemos dado un nuevo aliento a Puerto Edén y que habrá una recuperación en la zona en los próximos años», acota Flies.
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