Una reciente actualización de la Política Antártica Nacional subraya la necesidad de que las operaciones pesqueras en el océano Austral continúen desarrollándose bajo la premisa de una creciente sostenibilidad.
La modificación se alinea con la participación de Chile en la Comisión para la Conservación de los Recursos Vivos Marinos Antárticos (Ccrvma), vigente desde 1982 e integrada hoy por 25 estados y la Unión Europea (UE).
La actualización de la Política Antártica Nacional fue uno de los puntos centrales de la última sesión del Consejo de Política Antártica, inaugurada por el Presidente Sebastián Piñera y presidida por el canciller Andrés Allamand. En representación del ministro de Economía, Fomento y Turismo, participó, junto con otras autoridades, la subsecretaria de Pesca y Acuicultura, Alicia Gallardo Lagno.
«La sustentabilidad es un objetivo esencial. En el caso de la pesca, las distintas medidas de conservación y nuestros esfuerzos deben orientarse en esa dirección. Desde esa perspectiva, el valor que se le da en la Política Antártica tiene la mayor significancia», enfatizó la subsecretaria.
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En la instancia se aseguró que las operaciones pesqueras que se dan en el océano Austral -también llamado Antártico- «son acotadas, reglamentadas y sometidas a una acuciosa fiscalización». En el caso de Chile, se relacionan con el krill y el bacalao de profundidad.
A su vez, se afirmó que la actualización introducida en la Política Antártica acentúa el carácter «sostenible» y «responsable» que deben tener las faenas pesqueras en la zona, conforme con la ya mencionada Ccrvma, suscrita por Chile hace casi 40 años.
*La foto destacada es de contexto y corresponde a archivo de Greenpeace.