(Pulso) El subsecretario de Pesca y Acuicultura, Raúl Súnico, se refirió a las primeras cuotas 2014 asignadas de acuerdo con los Comité Científico Técnicos (CCT), la situación de la sardina y el jurel entre otros recursos, destacando es estado de sobreexplotación en que se encuentran.
¿Por qué se recortaron casi todas las cuotas por recurso para 2014?
Las cuotas de 2014 son las primeras que se asignan bajo el pronunciamiento de los Comité Científicos Técnicos (CCT) que entre sus facultades legales exige que las pesquerías alcancen lo que se denomina el rendimiento máximo sostenible por especie. Esa fórmula científica y de conservación hizo que la mayoría de las cuotas bajaran. Lamentablemente la realidad pesquera nacional es crítica. El 48% de los principales recursos están declarados en colapso o sobreexplotados y eso nos pone un desafío muy importante como Gobierno.
¿Por qué el jurel y la sardina son los únicos que subieron su cuota?
En el caso del jurel cabe puntualizar que las cuotas las determina un organismo internacional como la ORP (Organización Regional de Pesca) a la cual nuestro país está adscrito y donde se realiza un intenso trabajo técnico en el año sobre la materia.
La sardina, por su parte, representa desde el punto de vista de los volúmenes la principal pesquería del país junto con la anchoveta del norte, y sus períodos de recuperación son de mayor rapidez.
¿Van a reformar parte de la Ley de Pesca en lo referente a los bentónicos (mariscos y algas)?
Hemos realizado más de 60 encuentros en todo el país con organizaciones bentónicas. Nuestra apuesta fue realizar un trabajo participativo entendiendo las particularidades climáticas y geográficas del país, y la respuesta de los pescadores ha sido muy buena. Ahora estamos preparando la segunda etapa que tiene que ver con la preparación del proyecto en su articulado y que acogerá en gran medida lo propuesto por los propios pescadores. Acá la sustentabilidad y conservación de los recursos sigue siendo la principal directriz. Entendemos que la Ley Bentónica será la primera gran modificación que tendrá la Ley General de Pesca y Acuicultura (LGPA). El sector representa a más del 50% de la pesca artesanal en nuestro país y pasa por un estado pujante con muy buenos volúmenes de extracción y precios al alza. Mientras el sector extractivo de peces está en crisis, lo bentónico está en muy buen pie.
¿Qué pasa finalmente con el erizo que ha suscitado protestas por el menor nivel de cuota de captura?
El erizo es un recurso súper emblemático. Nuestro país concentra el 50% de las exportaciones a nivel mundial y este año los precios de compra y exportación fueron históricos. Nuestra misión es generar las condiciones para hacer de esta pesquería una unidad sustentable en el tiempo y no vamos a cometer los mismos errores del pasado, que por presión finalmente se aumentaban las cuotas terminando por sobreexplotar los recursos.
Tras el levantamiento de la veda de la merluza en septiembre, mucho se ha hablado de la pesca ilegal del producto, ¿es efectivo y cómo lo controlan?
Si bien en nuestro país la pesca ilegal no es un fenómeno nuevo, en el último tiempo se ha transformado en un problema muy serio. La drástica baja de cuotas de extracción de merluza derivó en un mercado negro que no podemos tolerar. Estamos trabajando en una agenda que pueda combatir la pesca ilegal. Esta no es patrimonio de un sector, por lo que buscaremos sancionar no solo a los que la extraen, sino que también a transportistas, comercializadoras y restoranes por dar solo unos ejemplos.
¿Se pretende modificar la ley?
Nuestra agenda legislativa modificará la ley en temas súper sensibles para los pescadores principalmente artesanales. La Ley Bentónica, regularización de caletas, acuicultura de pequeña escala, son solo algunas de ellas. Lo que no será sujeto de modificación es el peso de lo científico en la definición de cuotas y materias angulares como el fraccionamiento del sector.