En la industria chilena del salmón hay mujeres desempeñando funciones en diversas áreas. Según diagnósticos que se han realizado en el contexto de la mesa de “Mujeres salmoneras por la equidad de género”, convocada por SalmonChile, se ha informado que la industria tiene un poco más de 30% de participación de mujeres. La mayor parte de ellas se desempeñan en plantas de proceso (45%), mientras que en el área administrativa figura el 36%, un 24% en pisciculturas y sólo un 5% en centros de cultivo.
Si bien en el área productiva aún son pocas las mujeres presentes, cada día son más las técnicos y profesionales que se atreven a desempeñar funciones en los centros de producción, ya sea de agua dulce o agua mar, que es donde se cultiva y crece el salmón que más tarde va a exportación. Es allí donde está el corazón de la producción y donde la industria se la juega por dar paso a un producto con un buen rendimiento y que satisfaga los requerimientos de los mercados internacionales.
En este Día Internacional de la Mujer, AQUA quiso destacar el trabajo de algunas mujeres que se desempeñan en estas labores que, en su mayoría, son ejercidas por hombres, pero donde ellas hoy están aportando con conocimientos y destrezas que ayudan a dar una visión más amplia a las complejas faenas de producción.
Leslie Lara Orrego, jefa de Centro de Mowi Chile
¿Desde cuándo se desempeña como jefa de centro? ¿Cuáles son las funciones que usted debe realizar?
Ingresé a la industria en el año 2004, a realizar mi práctica profesional, través del programa Semillero de Mowi Chile. Inicialmente, me desempeñé como asistente y, durante los últimos seis años, como jefa de centro en distintos sitios de agua dulce de la compañía. Mis funciones principales son la administración de un centro de cultivo, lo que incluye los recursos humanos y productivos asociados al proceso, para asegurar el plan de producción y costos presupuestados, manteniendo estándares de alimentación, de higiene, seguridad y salud ocupacional, salud de peces, medio ambiente y el relacionamiento comunitario con los vecinos de nuestros lugares de trabajo.
¿Cómo ha sido la experiencia de trabajar como jefa de centro, en un rol que tradicionalmente es ocupado por hombres?
En general ha sido una buena experiencia. Creo que la primera barrera que debemos sortear son nuestros propios paradigmas; después las cosas se van dando en forma natural. Creo que lo más importante no es igualarnos a los hombres y perder nuestra propia esencia, sino que debemos complementarnos, reconociendo que el aporte de cada uno es igual de valioso. He sido testigo del constante aumento de la participación de mujeres en distintos cargos de la industria acuícola y siento que ese protagonismo es una excelente señal.
¿Qué aportes cree que entregan las mujeres en espacios de trabajo como el que usted ocupa, que son de mayor complejidad en términos de logística y operaciones?
Creo que como en todo ámbito de la sociedad, las mujeres hemos sido un gran aporte en el crecimiento y desarrollo de la economía. Nuestro principal aporte es potenciar el trabajo en equipo, aportando disciplina y estructura, manteniendo siempre una comunicación abierta y cercana. Esto es más relevante cuando las condiciones de logística y operaciones son más complejas. Pero si bien hemos avanzado en inclusión, aún nos falta, y creo que debemos ser ejemplos para las nuevas generaciones; el género no es una limitante para desarrollarnos en industrias como esta.
Sonia Velásquez, jefa de centro Piscicultura Río del Este de Salmones Camanchaca
¿Desde cuándo se desempeña como jefa de centro?
Me desempeño como jefa de centro desde hace 17 años y, dentro de mis funciones, destaca el hecho de administrar la piscicultura, garantizando la producción requerida, de acuerdo a estándares de calidad y bajo los costos presupuestados. Mi cargo es clave en la planificación, coordinación y control en el proceso de producción, dado que debe realizarse considerando las políticas internas y la legislación vigente, además de llevar por delante la misión de Salmones Camanchaca.
¿Cómo ha sido la experiencia de trabajar como jefa de centro, en un rol que tradicionalmente es ocupado por hombres?
En mis primeros años como profesional, sentí que, por ser mujer, debía demostrar que era capaz de cumplir con las funciones del cargo y del manejo de personal. Sin embargo, a medida que transcurría el tiempo, no fue necesario porque el trabajo habla por sí solo. Con perseverancia, responsabilidad y compromiso se puede lograr.
¿Qué mensaje daría a las mujeres que se desempeñan en la industria acuícola nacional en este Día Internacional de la Mujer?
Mi mensaje es que las mujeres podemos cumplir todas nuestras metas, siendo responsables transparentes y perseverantes. En lo relativo a nuestro rol en la industria acuícola, mi consejo es siempre conformar buenos equipos de trabajo, porque son ellos quienes te van a permitir alcanzar tus desafíos. Reconocer y valorar a cada uno de los colaboradores es clave en el logro de las metas exigidas.
Helga Albornoz Jata, operaria de centro en la Piscicultura Ketrun Rayen de Australis
¿Cuáles son las funciones que usted debe realizar?
Yo me desempeño como operaria de centro de piscicultura desde el año 2011. Mis funciones se centran en el área de incubación, alevinaje y estanques exteriores, donde veo temas de alimentación, extracción de mortalidad y tratamientos, entre otros.
¿Cómo ha sido la experiencia de trabajar como operaria en una piscicultura de salmónidos?
En general, ha sido una muy bonita experiencia. Siempre me he sentido apoyada por el equipo, tanto por mi jefe, como también por mis colegas. Se vuelve muy grato poder trabajar dentro de un entorno donde el apoyo es recíproco, sin mayores diferencias entre hombres y mujeres. Ahora bien, igual hay ciertos trabajos que ameritan mayor fuerza y estos los realizan generalmente los hombres, pero son casos puntuales. La verdad es que cada vez se nota menos las diferencias laborales entre hombres y mujeres.
¿Invitaría a más mujeres a desempeñar funciones similares?
En mi rol como mujer, aporto en aquellas laborales más finas dentro de esta etapa del salmón. La incubación y primera alimentación de los alevines son etapas que requieren de mucho cuidado, es un trabajo minucioso y detallista y creo que las mujeres contamos de forma natural con esas cualidades. Con esto, no quiero decir que los hombres no puedan hacerlo, pero si, quizás para las mujeres es un poco más natural. En mi caso personal, en las etapas que les comenté anteriormente, desarrollo una labor muy bonita y que me apasiona, por lo que sí invitaría a más mujeres a atreverse a vivir esta experiencia, donde por mucho tiempo fue un rubro principalmente de hombres, pero hoy en día, nosotras las mujeres podemos desarrollarnos en esas áreas.
Macarena Villagrán, técnico senior, Centro Harry 2 de AquaChile
¿Desde cuándo se desempeña como técnico senior en centro de cultivo?
Comencé en la empresa el año 2014, con el cargo de técnico junior y actualmente soy técnico senior. Las funciones que realizo son las de administrar el centro, distribuir las labores diarias con el resto del personal y la gestión de recursos para el centro. Otra de las labores que efectuamos como líderes es la de trabajar con cada persona de la dotación, en el sentido que siempre estén ampliando sus conocimientos, entregándoles las herramientas necesarias para que tengan un crecimiento laboral y que se sientan parte del equipo.
¿Cómo ha sido la experiencia de trabajar como técnico senior en un centro de cultivo de salmónidos?
Ha sido una buena experiencia y muy gratificante, ya que el ir avanzado profesionalmente, alcanzando cargos que han sido siempre ocupados por hombres, demuestra que somos igual de capaces de cumplir las labores del cargo. Además, siempre he tenido una buena acogida de los colegas con los que he tenido la oportunidad de trabajar, siempre con la disposición de ayudar.
¿Qué mensaje les daría a las mujeres que se desempeñan en la industria acuícola en este Día Internacional de la Mujer?
Que debemos sentirnos orgullosas de lo que somos y de donde estamos, que cada vez somos más las que decidimos insertarnos en este rubro que ha sido por décadas destinado para hombres, pero donde nosotras hemos demostrado que somos capaces, que somos fuertes para seguir con perseverancia. Tenemos que continuar avanzando y espero que seamos muchas más las que ocupemos cargos que han sido tan esquivos para nosotras.
Ilorena Subiabre, asistente técnico 1 del centro de cultivo Quilen Quellón de Cermaq Chile
¿Desde cuándo se desempeña en Cermaq Chile como asistente técnico?
Formo parte de la compañía desde hace ya diez meses, desempeñando la labor de asistente técnico 1 y dentro de mis funciones principalmente me toca enfocarme en la alimentación de los peces. Sin embargo, también apoyo en la administración, supervisión y coordinación de las actividades que se desarrollan en el centro de cultivo.
¿Cómo ha sido la experiencia de trabajar en este ámbito?
En general, el tiempo que llevo en la industria mi experiencia ha sido bastante buena. Las mujeres hemos ganado cada vez mayores espacios entregando una visión y liderazgo diferente.
¿Qué aportes cree que entregan las mujeres en espacios de trabajo como el que usted ocupa, que son de mayor complejidad en términos de logística y operaciones?
La integración femenina aporta una cuota de color a una industria más bien monocromática. Las mujeres somos organizadas, detallistas y siempre buscamos cumplir con los objetivos que nos hemos propuesto. Invito a todas las mujeres acuícolas que se atrevan a desarrollarse laboralmente, permitiéndole a la industria expandir sus capacidades productivas.
Fotografía principal: Mowi Chile