
sábado 10 de junio, 2023
Científicos analizaron la dieta de dos tipos de caprélidos, organismos marinos diminutos que sirven de alimento para peces, comprobando que son capaces de reutilizar las heces de otras especies, lo que los convierte en una opción sustentable y económica para la industria acuícola.
Prima de la industria a nivel global asciende a unos US$120 millones, mientras que lo perdido por las compañías del país sudamericano es de alrededor de US$100 millones.
En la salmonicultura, esta ventaja se traduciría en una mejor sobrevivencia durante la transferencia a mar y otros desafíos, como los baños anticáligus.
La visión del Ejecutivo contrasta con la del sector privado, que denuncia desde hace años que el marco normativo nacional hace prácticamente imposible obtener permisos para construir nuevos centros de cultivo.