Las fiscalizaciones de Sernapesca y Carabineros en las carreteras del país continúan mostrando una gran efectividad gracias al modelo de riesgo aplicado por la unidad de análisis e inteligencia. El último golpe a la pesca ilegal ocurrió esta madrugada en controles carreteros en Rafael, comuna de Tomé (región del Biobío).
Robertino Pinto, jefe de Fiscalización de Sernapesca Biobío, relató detalles del operativo. “Esto es parte de nuestras acciones coordinadas en el marco del combate a la pesca ilegal de la merluza común, una pesquería definida como estratégica por su importancia para la pesca y los consumidores, y su condición de sobreexplotada. Anoche junto a Carabineros del Retén de Rafael, detectamos el transporte de merluza común sin acreditación de origen legal por parte de comercializadores que tenemos definidos como agentes de riesgo por su comportamiento”, explicó.
En lo que va del año, Sernapesca Biobío ha incautado más de 15 toneladas de “pescada” ilegal. A diferencia de procedimientos anteriores en que se detecta infractores, esta vez los antecedentes serán entregados a la fiscalía para buscar responsabilidades de delito.
Cabe precisar que la pesca incautada provenía de la región del Maule para ser comercializada en Biobío. “Las cifras y datos dan cuenta de que hay grupos organizados en torno a estos ilícitos. Con la modernización institucional hemos optimizado nuestra fiscalización y eso nos permite estar en zonas de pesca, puntos de desembarque, hacer monitoreo satelital de embarcaciones, hacer revisión documental de los agentes en toda la cadena productiva, y además se trabaja coordinadamente en la macrozona centro sur”, sostuvo el jefe de Fiscalización de Sernapesca Biobío.
En efecto, a las 3,5 toneladas de merluza común ilegal incautadas en Biobío, se suman procedimientos similares por parte de Sernapesca que dejaron incautaciones de 837 kilos de merluza común en operativo en el Maule, y 4.2 Toneladas de reineta en la región de Valparaíso.
Fotografías: Sernapesca