Este martes 16 de junio, funcionarios del Servicio Nacional de Pesca y Acuicultura (Sernapesca) de la oficina de Castro, Chiloé, realizaron la clausura de la pesquera PROA, al determinar tras una denuncia las faltas de posesión y elaboración de erizo bajo talla.
Según lo detallado por la entidad pública en un comunicado de prensa, el procedimiento consistió en el cierre de todas las áreas productivas de la planta, incluyendo ocho cámaras, túneles y las puertas de acceso al recinto, el que se realizó sin inconvenientes, con la colaboración del representante legal y del jefe de planta de dicha empresa.
El director del Sernapesca en la Región de Los Lagos, Eduardo Aguilera, especificó que esta clausura «es de tres días, por lo que el viernes el Servicio acudirá a la pesquera a retirar los sellos».
Añadió que este tipo de acción no se realizaba hace aproximadamente 30 años, situación en la que se clausuró un secador de algas en Ancud, también en Chile, lo que además refleja que «no solo se persigue la ilegalidad en áreas como la pesca extractiva, sino en toda la cadena de procesamiento».
Por ello, la autoridad acuícola-pesquera realizó un llamado a quienes desarrollen su labor en distintos niveles de la actividad, ya que «la Ley General de Pesca y Acuicultura también contempla infracciones dentro de toda la cadena, como a comercializadores o plantas de proceso, provocando cierres que pueden ser más largos y que acarrean importantes pérdidas económicas a quienes no la respeten», enfatizó Aguilera.
Medidas de administración pesquera
Dentro de las medidas consideradas para la protección de recursos hidrobiológicos en nuestro país se encuentra el periodo de veda, que es el tiempo durante el cual está prohibido pescar en un determinado lugar o una determinada especie y la consideración de una talla mínima, que se refiere al tamaño mínimo que debe tener un recurso para ser extraído, el cual se basa en el tamaño de una especie cuando alcanza su madurez reproductiva.
En el caso del erizo (Loxechinus albus), según Aguilera, «en la Región de Los Lagos su talla mínima es de 6 centímetros, tamaño que busca asegurar que alcance la edad reproductiva correspondiente y fomentar la recuperación de la población, permitiendo la sustentabilidad del recurso y de otros, gracias a las medidas de administración que Sernapesca regula diariamente», destacó.