(La Opinión de Coruña) La feria acuícola-pesquera Conxemar dio paso este jueves 8 de octubre a la primera jornada del I Foro Internacional de Stakeholders (actores, agentes) de la Pesca. El comisario europeo de Pesca, Karmenu Vella, visitó Galicia (España) por primera vez para acudir a este evento, en el que anunció que la Comisión destinará EUR$675 millones a combatir la pesca ilegal hasta 2020.
Con la celebración del vigésimo aniversario del Código de Conducta para la Pesca Responsable de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO, por sus siglas en inglés) como telón de fondo, el mandatario ensalzó la labor de este documento, que calificó como una «gran inspiración» en el proceso de reforma de la Política Pesquera Común (PPC). «Los resultados -en referencia al Código- se empiezan a notar con un creciente número de reservas de pesca a niveles sostenibles», explicó.
La intervención del maltés se centró en el futuro de la pesca. Por ello, detalló que la Unión Europea (UE) invertirá más de EUR$500 millones hasta 2020 solo para obtener los mejores datos posibles de los stocks y mejorar los informes científicos. Unas cifras pequeñas si tenemos en cuenta que la flota europea es responsable de, aproximadamente, el 5% de las capturas mundiales. Por este motivo, el comisario recordó la necesidad de mirar «más allá de nuestras fronteras». «En los últimos cinco años hemos ayudado a realizar reformas y a conseguir que la pesca ilegal de los barcos sea cosa del pasado en más de 50 países», concretó en su discurso.
Vella sostuvo también que la FAO se merece un «homenaje» por parte de la UE. «Nuestra legislación contra la pesca ilegal, no declarada y no reglamentada (IUU, por sus siglas en inglés) está fuertemente basada en el Plan de Acción Internacional de la FAO», subrayó.
Trabajo por hacer
Mientras, el comisario de Pesca apuntó que todavía queda trabajo por hacer. En este sentido, Vella declaró que es necesario mejorar la eficacia de las organizaciones regionales pesqueras, cerrar lagunas que todavía hacen posible que el pescado ilegal llegue a algunos mercados e intensificar los esfuerzos de control para evitar que los buques de pesca IUU eludan las normas. Para esto último, el comisario considera imprescindible crear un identificador único global y un registro mundial de buques pesqueros.
La ministra de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente de España, Isabel García Tejerina, apuntó por su parte que este registro mundial ayudaría a combatir la pesca ilegal, uno de los principales objetivos del gobierno español. Encargada de la inauguración, Tejerina afirmó también que España es líder indiscutible en el control de la actividad pesquera aunque matizó que supuso un «notable esfuerzo» integrar y reforzar los sistemas de inspección. «Aún queda camino por recorrer», sentenció.
La consejera del Mar de Galicia, Rosa Quintana, sostuvo durante su intervención que el compromiso de los profesionales gallegos del mar derivó en que se confiscasen menos artes de pesca ilegales y se decomisasen menos kilos de pescado y marisco ilegal. «De no existir el Código de la FAO los recursos atravesarían una situación mucho peor», comentó. En el acto -al que también acudieron el subdirector Pesca y Acuicultura de la FAO, Arni Mathiesen- intervino, a través de un vídeo, el presidente de la FAO, José Graziano da Silva, que recordó que el código es un documento «robusto e innovador» así como «unánimemente» reconocido.