Duplicar el número de empresas adheridas por año a los Acuerdos de Producción Limpia (APL) y generar Centros de Desarrollo Empresarial para sensibilizar a otras 200.000 empresas en temas de producción limpia, es el desafío que se ha propuesto el Consejo Nacional de Producción Limpia (CPL) a través de su recientemente aprobada Política 2014-2018, que contempla la inversión de $7.000 millones.
El grupo de entidades que se verán favorecidas corresponden a pequeñas y medianas empresas (MiPymes) localizadas a lo largo del país y que buscan incorporar prácticas productivas limpias al interior de sus instalaciones en pro del mejoramiento de la eficiencia y la calidad de sus faenas.
“Debemos romper con la creencia de que ser responsable medioambientalmente significa solo gasto y que afecta la competitividad. Miles de nuestros beneficiarios han comprobado que producir limpio es una excelente estrategia para mejorar la realidad al interior de sus empresas, aumentando su competitividad”, adujo el director ejecutivo del CPL, Juan Ladrón de Guevara.
Añadió que, junto con el aumento del número de APL, se ha proyectado la creación de, al menos, cuatro centros que se dedicarán a la transferencia de tecnologías limpias. Esto se traducirá en asesoría gratuita de especialistas calificados, visitas en terreno de profesionales sectoriales, formación de capacidades técnico-productivas, entre otros beneficios para las empresas. El primero se implementará en la Región del Maule, gracias al aporte de $483 millones por parte del Gobierno Regional.
El ejecutivo destacó las bondades que ofrecen los APL, pues su “carácter voluntario es una oportunidad que facilita el diálogo público-privado y que permite explorar nuevos caminos y respuestas a las necesidades ambientales y productivas de nuestro país”, subrayó Ladrón de Guevara.
Para la subsecretaria de Economía y presidenta del CPL, Katia Trusich, “el acuerdo al que se ha llegado implica un gran desafío como país: seguir sumando adherentes públicos-privados conscientes y comprometidos en la producción limpia y sostenible. Los APL no solo significan ser cuidadosos con el medioambiente, sino también buscan ser respetuosos con comunidades en términos sociales y económicos”, enfatizó la autoridad.
En ese marco, el CPL impulsará un programa de sensibilización a 200.000 empresas o emprendedores que se acercan a los Centros de Desarrollo Empresarial del Servicio de Cooperación Técnica (Sercotec), en donde se les entregará información y capacitación con la idea de mejorar su competitividad y hacerlos más sostenibles.
Otro de los beneficios que traerá la nueva Política de Producción Limpia es el desarrollo de instrumentos que le permitirá a las empresas adheridas a los APL facilitar el acceso a instrumentos de financiamiento por parte de la Corporación de Fomento de la Producción (Corfo), ya sea por acceso a recursos o a garantías.
En tanto, la subsecretaria de Economía destacó el énfasis que dicha política fija para el desarrollo regional. “Las regiones tienen mucho que aportar porque la situación es dispar en las distintas zonas del país. Por esto esperamos que a través de acuerdos sectoriales de producción limpia, las empresas se comprometan a dar un giro a sus políticas productivas basadas en la responsabilidad con el entorno”, cerró Trusich.
Consejo directivo
El consejo directivo del Consejo Nacional de Producción Limpia es presidido por la subsecretaria de Economía, Katia Trusich, y conformado por Marko Razmilic, presidente de la Asociación de Industriales de Antofagasta; Hermann Von Mühlenbrock, presidente de la Sociedad de Fomento Fabril (Sofofa); Andrés Santa Cruz, presidente de la Confederación de Producción y del Comercio (CPC); Patricio Crespo, presidente de la Sociedad Nacional de Agricultura (SNA); y Roberto Fantuzzi, presidente de la Asociación de Exportadores de Manufacturas (Asexma), en representación del sector privado.
El sector público, a su vez, se encuentra representado por Eduardo Bitrán, vicepresidente de la Corfo; Marcelo Mena, subsecretario de Medio Ambiente; Jimena Jara, subsecretaria de Energía; Cristán Franz, superintendente de Medio Ambiente; Ángel Sartori, director Nacional del Servicio Agrícola y Ganadero (SAG); y Juan Ladrón de Guevara, director ejecutivo del CPL.