La presidenta de la Confederación Nacional de Pescadores Artesanales de Chile (Conapach), Zoila Bustamante, está preocupada por lo que está sucediendo con la Ley de Pesca. A su juicio, los intentos de derogar el cuerpo legal que rige desde febrero de 2013 responden más a una actitud populista de ciertos congresistas que a una discusión seria sobre el futuro del sector.
“Cuando le pidan su opinión a los pescadores artesanales que realmente pescan otro gallo va a cantar. Nosotros participamos en la discusión que se dio en 2011; propusimos 86 indicaciones, de las cuales 36 fueron incluidas. Realmente no entendemos lo que está pasando y porqué algunos actores están llevando las cosas a este punto. No se están midiendo las consecuencias de lo que sería derogar esta ley. De hecho, hay algunos que cuando les preguntan, ni siquiera saben qué es lo que quieren cambiar”, expuso la dirigenta.
La representante de la Conapach añadió que “aquí lo único que se quiere es incorporar la figura de licitaciones para que entren más actores al sector. Yo me pregunto, ¿qué actores? Ya hubo licitación de sardina, donde los artesanales tuvimos cero posibilidad de participar. Los dos que postularon tuvieron que pagar el doble que el resto y finalmente quedaron las mismas empresas de siempre. Entonces, ¿qué actores nuevos podrían entrar a la industria vía licitación?”.
Zoila Bustamante destacó que “los pescadores necesitan que los parlamentarios legislen para ellos. Hay cuatro leyes paradas por esta situación. Necesitamos que se trabaje en la Ley de Caletas, en el Indespa, en la bonificación de algas. ¿Qué esperan nuestros legisladores? Lo ideal sería que se preocuparan de estas leyes y si hay que modificar algo en la Ley de Pesca, estamos preparados para ello. Nosotros tenemos claro lo que queremos modificar y si hay que dar la pelea de nuevo, así lo haremos. Pero no podemos dejar pasar que por una empresa, unos cuantos dirigentes y un par de parlamentarios populistas hoy estén todos asustados”.
La presidenta de la Conapach destacó que el gremio estará atento a lo que pueda pasar en marzo próximo, que es cuando, seguramente, la discusión por la Ley de Pesca se retome. “Si derogan esta ley, entonces podremos pedir que se derogue la Ley de Isapres y otras más. Estas personas tendrán que asumir las consecuencias”, subrayó.
“Queremos que de una vez por todas se preocupen de la gente que sale al mar, de los que trabajan. Hay muchos legisladores que nos van a pedir el voto, pero a la hora de ver las leyes se olvidan de eso. Eso, como país, nos tiene hoy muy perjudicados”, concluyó la representante del gremio que representa a más de 40.000 pescadores artesanales a lo largo del país.