(La Tercera) Una auditoría realizada por la Contraloría Regional de Valparaíso a la Dirección Regional de Aduanas de esa región y a las administraciones de San Antonio y Los Andes reveló «diversas infracciones al compendio de normas aduaneras», entre las que destacó una “escasa fiscalización” a las declaraciones de almacén particular de importación (DAPI), registro que corresponde a las mercaderías que quedan bajo custodia del Servicio Nacional de Aduanas (SNA), pero en dependencias particulares.
Las infracciones detectadas por Contraloría tienen relación con: ausencia de declaraciones que acrediten que los bienes importados serán depositados bajo régimen de almacén particular; poca fiscalización en los almacenes particulares, pérdida de productos, y especies almacenadas en un lugar distinto al declarado, entre otras.
La investigación realizada por Contraloría buscaba “verificar el cumplimiento de las normas legales y reglamentarias relacionadas con el ingreso de mercancías amparadas por el régimen suspensivo de Almacén Particular de Importación y la valorización de las declaraciones de ingreso y pago de derechos aduaneros de dicho régimen”.
A modo de ejemplo, la auditoría reveló que entre los meses de enero y agosto de 2016 de un total de 7.289 declaraciones de almacén particular de importación, solo un 0,1% fue fiscalizado por Aduanas. “Se comprobó que la Dirección Regional de Aduanas de Valparaíso y las administraciones de Aduanas de San Antonio y Los Andes han efectuado escasas fiscalizaciones sobre los almacenes particulares”, dice el informe.
Aduanas cuenta con locales particulares habilitados -por un período determinado- para el depósito de mercancías, sin previo pago de los derechos e impuestos que causen en su importación. Sobre esta materia, el presidente de la Asociación Nacional de Funcionarios de Aduanas (Anfach), Marcelo Reyes, explicó que “una vez que el importador decide usar esa mercancía, se hace una declaración y la mercancía se puede mover y comercializar de esos almacenes. Sin esa declaración no se puede mover nada”.
Fiscalización casi nula
En ese sentido, añade que “lo que muestra la auditoría de Contraloría es que al no haber fiscalización a este tipo de almacenes particulares, la mercadería no está el tiempo definido y se saca antes sin realizar ninguna declaración, por lo que no se paga ningún impuesto y eso es contrabando”.
Consultados sobre el tema, desde Aduanas señalaron que respondieron a la Contraloría y que “desde el año 2016 Aduanas ha implementado medidas tendientes a reforzar los procedimientos de fiscalización de regímenes suspensivos, adoptando medidas claves como generar un Plan Integrado con indicadores y metas definidas para el 2017, incrementando las fiscalizaciones a los almacenes particulares de importación, priorizando recursos en este ámbito, incorporando además control de riesgos adicionales, fiscalización a posteriori de las tramitaciones y revisiones mensuales permanentes”.
El informe también detectó que “tres de los equinos importados por la empresa Maxcon Ltda., a través de la DAPI No 4250158643, no fueron encontrados en su recinto (…) Por lo que la Dirección Regional de la Aduana Metropolitana procedió a dejar constancia de aquello en un Acta de Fiscalización, por el delito de contrabando”. En esa línea, Contraloría dio cuenta de “mercancías que no contaban con identificación que les permita ser reconocidas como especies almacenadas bajo régimen suspensivo; faltante de 1.486 cajas de productos capilares; mercancías internadas al país sin contar con autorización del ISP; especies almacenadas en un lugar distinto al declarado; falta de inventario de especies, que indique las entradas y salidas de las mercaderías, todo lo cual generó 40 denuncias al Tribunal Tributario y Aduanero”.
Visiones dispares
“Aduanas ha dejado de hacer lo que la ley le encomienda. Nosotros desde hace mucho tiempo que venimos denunciando que el Servicio Nacional de Aduanas no cumple con su rol fiscalizador a cabalidad, esto lo hemos denunciado ante el Ministerio de Hacienda, en la Cámara de Diputados, y diversas autoridades”, aseguró el represente de los funcionarios.
Desde Aduanas, en tanto, aseguraron que el reforzamiento de los procedimientos de fiscalización ha dado resultados. “Durante 2016 y lo que va de 2017, la Aduana ha tenido resultados históricos en materia de fiscalización, que reflejan la instalación de una nueva estrategia en este ámbito enfocada al trabajo de inteligencia, el fortalecimiento del uso de tecnologías no invasivas, entre otros. Así, con la creación de la Unidad de Análisis de Riesgo, se ha redireccionado de manera más asertiva nuestra fiscalización”, declaran.
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