El Centro de Estudios de Sistemas Sociales (CESSO), a solicitud de la Subsecretaría de Pesca y Acuicultura (Subpesca), será la entidad encargada de promover la formulación de una nueva política nacional de algas que busque diversificar sus principales potencialidades y resguardar su uso y explotación.
En ese marco se desarrolló en la Facultad de Ciencias del Mar de la Universidad Católica del Norte (UCN), sede Coquimbo (Región de 
Coquimbo), el primero de una serie de diez talleres de trabajo que se realizarán a lo largo del país con la finalidad de levantar desde los propios usuarios las problemáticas y oportunidades que entrega este recurso marino.
El director del Centro de Estudios de Sistemas Sociales, Carlos Tapia, explicó que se han adjudicado la ejecución del proyecto por intermedio de la Subpesca, que tiene como propósito formular la política nacional de algas. «El objetivo de este primer taller es poder levantar con la participación de los propios usuarios, pescadores artesanales, gente de la industria, cultivo, academia, Subpesca, Sernapesca (Servicio Nacional de Pesca y Acuicultura), institucionalidad de fomento, entre otros, las problemáticas que debiesen ser consideradas en la política y las oportunidades que deberían ser parte de esta normativa», detalló Tapia.
De igual manera, el timonel del CESSO precisó que «la necesidad de esta política surge a raíz de un diagnóstico que está presente en los distintos actores, donde ven que hay un potencial por un lado, pero en donde también vislumbran que es necesario tener una mirada más integral de un recurso que tiene muchas particularidades».
Por su parte, el encargado de Algas y Acuicultura de Pequeña Escala de la División de Acuicultura de la Subpesca, Sergio Meza, comentó que las potencialidades de las algas son variadas. «Es una línea que tenemos que empezar a trabajar. Hoy claramente se está explotando principalmente seco picado y un porcentaje con valor agregado, pero creemos que por la cantidad de alga que hay en el medio ambiente es una industria que puede crecer no solo en lo económico sino también en lo social y ser un aporte al medio ambiente», subrayó Meza.
El alga como pesquería está considerada en la actualidad como una actividad relevante para muchos pescadores artesanales y que sustenta una actividad industrial importante, en donde hay poco valor en su potencial como uso alimentario y medicinal, tanto para animales como para humanos.
Visiones del sector
Con la idea de hacer partícipe a todos los actores del sector, la Subpesca inició el trabajo de conocer la visión y percepción de los involucrados.
La representante de la Asociación de Productores de Algas, María Graciela Ortiz, manifestó que lo interesante que tiene contemplado esta política es un tema de cultivo de algas en las áreas de manejo. «No obstante, esta política tiene que ir de la mano con una diversificación, con la elaboración de nuevos productos. Si vamos a cultivar vendiendo materia prima al extranjero no nos va a dar el precio, a pesar del costo del cultivo. En resumen, como normativa nos parece bien siempre y cuando vaya con Investigación y Desarrollo (I+D) de nuevos productos y servicios», subrayó.
La directora ejecutiva del Centro de Investigación y Desarrollo en Algas de la Facultad de Ciencias del Mar de la UCN, Fadia Tala, complementó que es una «buena instancia para tener una normativa que permita un uso adecuado de los recursos algales, de cómo diversificar su uso, de cómo darle valor agregado y, en este sentido, la UCN, y específicamente el centro que dirijo y en general el sector de investigación, ve con muy buenos ojos el que se genere una política porque permitirá direccionar y estimular la investigación básica y aplicada para hacer un buen manejo y diversificación de estos».
Finalmente, el administrador de finanzas de la Federación de Pescadores Artesanales de Coquimbo (Fepemach), Enrique Altamirano, destacó: «Nos pareció interesante esta iniciativa que va orientada a la sustentabilidad del recurso y al mejoramiento de la normativa vigente. En este sentido, lo que estamos viendo en el taller apuntó a ello», concluyó Altamirano.