Este jueves 3 de marzo comenzó la operación de pesca de sardina común y anchoveta para embarcaciones no tecnificadas (que no poseen sonar) de la Región del Biobío. Así lo destacó la directora zonal de Pesca y Acuicultura, Lilian Troncoso, quien confirmó que este inicio de temporada se ha «desarrollado normalmente», reportándose ya a tempranas horas los primeros desembarques de recursos, con un promedio de 120 ejemplares por litro, es decir, con tallas de alrededor de 9,5 centímetros.
La representante regional de la Subpesca detalló que a partir de los resultados del monitoreo de reclutamiento obtenidos por el Instituto de Fomento Pesquero (IFOP) entre el 22 y 28 de febrero, se determinó abrir la temporada de captura de ambos recursos, ya que se cumplía con los indicadores biológicos establecidos, monitoreo que este año tuvo una mayor cobertura de área, ya que para la realización del mismo se incorporaron más embarcaciones para la toma de muestras.
De este modo, durante los primeros diez días corridos y de manera exclusiva podrán operar las embarcaciones artesanales no tecnificadas, pudiendo llegar a un universo de 364.
En el caso de la Región del Biobío, la cuota precautoria para pequeños pelágicos establecida es de 194.236 toneladas, de los cuales 173.425 corresponden a sardina común y 20.811 a anchoveta.
Lilian Troncoso aseguró que la Subsecretaría de Pesca y Acuicultura (Subpesca) ha realizado un intenso trabajo en conjunto con los pescadores artesanales, a través del Comité de Manejo, para ordenar la pesca extractiva de ambos recursos, por lo que desmintió la denuncia del dirigente Hernán Cortés respecto a la libertad de zarpe para el sector artesanal, la cual calificó como información «tergiversada» .
«La apertura de la temporada considera por primera vez las operaciones de descarga de forma exclusiva de la pesca artesanal por los primeros 25 días, periodo en donde el sector industrial no realizará descarga de sardina y anchoveta en la Región del Biobío, y eso hay que destacarlo, ya que permite mejorar el proceso de la operación en lo que se refiere a evitar atochamientos de desembarque y saturación de pozos de recepción de recursos», subrayó.
Para cerrar, la directora zonal de Pesca y Acuicultura del Biobío aseveró que existe compromiso de los pescadores artesanales de la región para ordenar las faenas extractivas y entienden su importancia. «Es por ello que continuaremos trabajando para seguir mejorando», concluyó.