Este jueves 28 de mayo, los trabajadores agrupados en la Asociación Nacional de Funcionarios de Aduanas (Anfach) depusieron el paro que los mantuvo movilizados por nueves días. Y, a pesar que el sector exportador valoró el acuerdo entre la Anfach y el Gobierno, entregaron cifras que evidencian los efectos de la paralización y llamaron a las autoridades a anticipar este tipo de escenarios con el objetivo que no se repitan.
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Uno de los rubros más afectados fue la salmonicultura. Es que, según datos reportados por la Asociación de la Industria del Salmón de Chile A.G. (SalmonChile), las pérdidas de venta de producto fresco se cifran en US$4 millones diarios (US$32 millones acumulados), generando una merma total de 4.000 toneladas o 200 camiones.
El principal comprador de salmón fresco de Chile es Estados Unidos. En este mercado, producto del paro, aseguró SalmonChile, se generaron ruptura de contratos, situación que se suma a los reemplazos de programas y contratos de corto y de largo plazo con salmón noruego y canadiense que ya han realizado los clientes del país norteamericano.
«El paro produjo una pérdida de confianza y reputación en Estados Unidos, que es el principal mercado para el salmón de Chile (US$1.300 millones anuales, o el 30% del total de la industria chilena)», subrayó el gremio salmonicultor.
Sobre los efectos de caja para las productoras, la misma entidad precisó que se ha perdido venta de salmón fresco en US$32 millones aproximadamente. «Esto repercute en pérdida de liquidez de las empresas para pagar sus compromisos con proveedores, tomando en cuenta la restricción de la banca a otorgar créditos», enfatizó SalmonChile.
De igual manera, se refirió a los impactos en términos sanitarios. «Tal como hemos manifestado en la discusión de la Reforma Laboral, el ciclo del salmón no puede parar, ya que se trata de animales que requieren cumplir ciclos productivos, donde la paralización comercial implica parar las plantas de proceso y parar la cosecha, lo que compromete la salud de los peces con la consiguiente proliferación de enfermedades que ponen en riesgo el sistema», añadió.
Para cerrar, en términos de los efectos logísticos, afirmaron que más de 70 camiones tuvieron que ser devueltos desde el Aeropuerto Internacional Arturo Merino Benítez de la ciudad de Santiago (Región Metropolitana) durante los nueve días de paro. «Esto incurrió en costo de transporte, de congelamiento y del menor valor del producto al no poderse vender en estado fresco», concluyó SalmonChile.