Con gran entusiasmo, el equipo de NODO Chile, consultora especializada en innovación social, sustentabilidad y trabajo con comunidades ubicada en Puerto Varas (región de Los Lagos), recibió la certificación internacional de Empresa B.
Esta distinción reafirma el compromiso de NODO con el desarrollo sustentable de las empresas a través de la generación e implementación de iniciativas de impacto positivo en la sociedad y el medioambiente.
NODO Chile se especializa en desarrollar estrategias de sustentabilidad basadas en alianzas con empresas e instituciones, que permiten aumentar la creación de valor en las comunidades en que estas se insertan. A través del trabajo en terreno, busca generar conexión entre el negocio y su entorno, basados en la transparencia, pertinencia y la proactividad para potenciar el desarrollo local.
«Como Empresa B, seguiremos enfocando nuestro trabajo a producir cambios positivos junto a quienes nos relacionamos, ahora como parte de una red multinacional, que nos nutre de experiencias y conocimientos para lograr nuestro propósito», manifiesta el director ejecutivo de NODO Chile, Sebastián Videla.
Para obtener esta certificación, los integrantes del equipo de NODO participaron de un proceso de evaluación en conjunto con Comunidad B Patagonia, que entrega asesoría y metodología para permear en todas las áreas de trabajo el modelo de impacto. Tras ser aprobada por B Lab, de Estados Unidos, NODO pasa a ser parte de una comunidad de empresas orientadas a una economía inclusiva, que busca el bienestar de las personas, la sociedad y la naturaleza.
«Vemos que cada vez más empresas están poniendo su foco en el cuidado del medioambiente y en la relación con las comunidades vecinas. Nosotros los apoyamos con estrategias de trabajo innovadoras que vayan produciendo el cambio y el desarrollo social», agrega Sebastián Videla.
¿Qué es una empresa B?
Todas las Empresas B miden su impacto social y ambiental y se comprometen de forma personal, institucional y legal a tomar decisiones considerando las consecuencias de sus acciones a largo plazo en las áreas de comunidad, medioambiente, trabajadores y gobernanza. Asumen con responsabilidad y orgullo pertenecer a este movimiento global de empresas que quieren hacer un cambio, utilizando la fuerza de mercado para dar soluciones a problemas sociales y ambientales.
Este nuevo tipo de empresa amplía el deber fiduciario de sus accionistas y gestores en sus estatutos para incorporar intereses no financieros de largo plazo, cumpliendo el compromiso de mejorar de forma continua sus impactos socioambientales, y operando con altos estándares de desempeño y transparencia.
De la certificación se desprende que la Empresa B aspira a ser la mejor empresa PARA el mundo y no solo del mundo.