Tras una semana de auditoría, que incluyó actividades en terreno y entrevistas virtuales, por el contexto sanitario actual, Skretting Chile recibió hace unos días la confirmación de la re-certificación bajo el estándar Global G.A.P., Compound Feed Manufacturing, estándar que evalúa el cumplimiento de requisitos de Calidad, Inocuidad, Sustentabilidad, Seguridad, Salud y Medio Ambiente.
Global G.A.P. es una de las mediciones internacionales más reconocidas dentro de la industria acuícola y tiene una especialidad referida a plantas de alimentos llamada The Global G.A.P. Compound Feed Manufacturing Standard (CFM), certificación que se debe auditar de forma anual, asegurando el cumplimiento de cada uno de los requisitos establecidos en la lista de verificación.
“Este año fue un tremendo desafío, ya que, por las condiciones excepcionales de la pandemia, tuvimos que desarrollar esta auditoría en forma semi presencial y con una sola visita a terreno, sin la posibilidad de estar presentes de forma permanente en las plantas, priorizando por supuesto la salud de quienes operan directamente en ellas. También fue un desafío grande haber podido desarrollar correctamente todo el proceso, cumpliendo todos los protocolos internos de prevención y haber logrado una puntuación perfecta de forma remota», comentó Juan Manuel Leiva, jefe de Aseguramiento de Calidad y Medio Ambiente de Skretting.
El estándar internacional Global G.A.P. revisa los diferentes aspectos de la planificación y manufactura de los productos, enfocándose tanto en la inocuidad alimentaria, trazabilidad, salud y seguridad ocupacional, así como en la sustentabilidad de los procesos de elaboración de alimentos.
En el proceso, se evalúan las medidas que la compañía toma para evitar accidentes, el bienestar de los trabajadores, y en especial, durante este año, las medidas internas tomadas para evitar contagios de Covid-19. Además de este enfoque, se evalúa la inocuidad alimentaria del proceso, que incluye desde la compra de las materias primas y selección de proveedores, hasta procesos de recepción y almacenamiento.
También se auditan las medidas de prevención de contaminación cruzada, los controles de procesos, los requisitos de los clientes y el control de inocuidad alimentaria a través de monitoreos, para captar la posible asociación con sustancias no deseadas. Finalmente, se miden los compromisos y estándares en aspectos de medio ambiente y sustentabilidad de la compañía.
Juan Manuel Leiva recalcó la importancia de este tipo de iniciativas para diferenciar a las compañías en términos de liderazgo: “De las unidades productivas que tiene Skretting en el mundo, Chile es la segunda más grande, representando más del 25% del volumen de alimento para especies salmónidas, producido por la compañía a nivel global. Skretting Chile fue la primera unidad productiva del grupo en obtener esta certificación, que hoy es un estándar requerido por clientes y miembros de la industria acuícola. A esto se suman las certificaciones y estándares de la marca a nivel global, como Nutrace, que aplica a todos los países donde Skretting se encuentra presente”, expresó.
La industria acuícola hoy busca y valora este tipo de certificaciones para asegurar el cumplimiento de altos estándares internacionales en inocuidad alimentaria, sustentabilidad y medio ambiente, seguridad y salud, como de buenas prácticas de manufactura; estándares que Skretting Chile continúa manteniendo de manera impecable, año tras año, según lo informado desde la compañía.
En la fotografía: Juan Manuel Leiva. Fuente: Skretting Chile.