En el marco del informe sobre la Ley de Pesca que la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO, por sus siglas en inglés) entregó a la Presidenta de Chile, Michelle Bachelet, el presidente del Consejo Nacional de Defensa del Patrimonio Pesquero (Condepp), Jorge Bustos, y su vocero, Hernán Machuca, evaluaron como positivo los trascendidos que apuntan a que considera que la asignación de derechos de pesca debe tener «aceptabilidad política». Sin embargo, advirtieron que esta debe contener una serie de requisitos de «cara a la gente».
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«Es un avance que la FAO haya destacado que los derechos de pesca deben tener aceptabilidad política, pero el Gobierno no puede olvidar que esta aceptabilidad es de cara a la gente, con puertas abiertas, sin letra chica ni corrupción», enfatizó Machuca.
En tanto, Jorge Bustos recordó que según lo que ha manifestado el subsecretario de Pesca y Acuicultura, Raúl Súnico, los temas de fondo de la denominada «Ley Longueira» podrían tener cambios en 16 años más, como es la asignación de derechos de pesca a la gran industria por 20 años renovables a perpetuidad. «Esto es una barbaridad, los cambios deben realizarse ahora», puntualizó el dirigente.
Por último, respecto a los avances en sustentabilidad que destaca la FAO, ambos representantes de la Condepp manifestaron que la ley «solo hace un saludo a la bandera». A lo que añadieron: «Nada hay que de verdad proteja los recursos pesqueros. Por esto tenemos 18 especies sobreexplotadas y agotadas; y los comités científicos técnicos solo dan recomendaciones y no son autónomos».